COSA DE PRENSA / Oración por el mundo

 

 

  • EEUU al borde del colapso
  • El reverendo Graham: orar
  • Hágase la voluntad de Dios
  • Voto desastroso, inhumano
  • El Pentágono apoya a Trump
  • Desconoce triunfo de Biden

 

 

Javier Rodríguez Lozano

 

 

Lunes 21 diciembre 2020.- Los Estados Unidos están al borde del colapso y con ellos el mundo.

 

El reverendo Franklin Graham, hijo de una figura internacional, hace un llamado: “Ore por el presidente Trump, ore por Joe Biden y ore por nuestra nación, que superemos esto y que se haga la voluntad de Dios”.

 

Pase lo que pase el 6 de enero próximo ni Estados Unidos ni el mundo volverán a ser lo mismo, después de una devastadora emergencia sanitaria, muy posiblemente de origen humano, y unas desastrosas elecciones absoluta y totalmente inhumanas.

 

Donald Trump no cuenta con el apoyo de importantes instituciones, como la Corte Suprema de Justicia, inmersa en una gran corrupción, al igual que la CIA y el FBI, además de muchos malos republicanos y algunos estadunidenses que se vendieron a George Soros y a China.

 

Sin embargo, sí está totalmente apoyado por el Pentágono y el Departamento de Defensa, que no solo iniciaron la estratégica remoción de funcionarios como Henry Kissinger y Madeleine Albright, exsecretarios de Estado, sino que ya investiga un complot internacional y desconocen a Biden como “presidente electo”.

 

El periódico The Epoch Times y periodistas digitales independientes de la prensa alineada han consignado este fin de semana un sumario de las tropelías encontradas en el proceso electoral estadunidense.

 

Por ejemplo, en mes antes de las elecciones, China envió 400 millones de dólares a la empresa Dominion Voting, que instaló sus máquinas en 28 de los 50 estados de la Unión Americana, principalmente en los siete “en duelo” y donde se encubó el fraude electoral.

 

Por otro lado, el Pentágono se voltea contra Gina Haspel, directora de la CIA, y también tiene el ojo puesto en el director del FBI, luego de añadir a ocho nuevos miembros a su Junta Política de Defensa.

 

El secretario de Defensa recientemente nombrado, Christopher Miller, anunció la semana pasada un esfuerzo para rehacer el consejo asesor independiente después de que eliminará a 11 asesores de alto nivel en noviembre.

 

Los renunciados se opusieron a describir a China como un país con la intención de hacerle daño a los EEUU, y omitieron asesorar al Presidente debidamente, “frente a la creciente influencia del Partido Comunista Chino dentro de los EEUU e incluso entre sus aliados”.

 

Miller explicó en un comunicado que los nuevos miembros aportan una gran experiencia en asuntos de defensa y seguridad nacional al comité asesor, dado su paso por el Congreso al Departamento de Estado, las Fuerzas Armadas y más allá.

 

Confío en que el Departamento de Defensa se beneficiará enormemente de su tiempo y servicio en la Junta, añadió Miller.

 

La lista de nuevos funcionarios indica que la administración Trump continúa para reemplazar a los asesores del Pentágono con funcionarios leales al Presidente.

 

La semana pasada el Pentágono también recurrió al experto en políticas de China, Michael Pillsbury, para presidir la junta, y nombró a la exjefa de la Administración Nacional de Seguridad Nuclear, Lisa Gordon Hagerty, como miembro del Consejo.

 

Entre los11 asesores despedidos en noviembre estaban Henry Kissinger y Madeleine Albright, que tendían a favorecer al Partido Comunista Chino, según acusó Christopher Miller.

 

Se dice que Trump, en lugar de renunciar a su secretario de Justicia, William Barr, lo llamó a la Oficina Oval y pudieron haber pasado cualesquiera de estas cosas:

-Barr pudo haberle dicho al Presidente la verdadera razón de su actitud en relación a Hunter Biden, pero su padre podía ser el próximo presidente, o calló porque no podía revelar el complot.

 

La abogada de Trump, Lyn Wood, mencionó que el presidente de la Corte Suprema de Estados Unidos, John Robert, insultó al Presidente y dijo que “no se le puede permitir otro mandato”, Robert aparece relacionado con George Soros.

 

Una usuaria, Jennifer Lynn Lawrence, tuiteó que John Robert, presidente de la Corte Suprema, estuvo en la reunión del Foro Económico Mundial de Davos de enero de este año.

 

Ahí -agregó Lynn- Soros enalteció al juez Robert en dos ocasiones durante su discurso en el que el magnate húngaro habló mal del Presidente Trump, “tratando de desprestigiar su trabajo en beneficio de Estados Unidos”.

 

También dio a entender Soros que, “el juez Robert podía ser de ayuda en el logro de la impugnación que los demócratas intentaban en ese momento”.

 

El juicio en el Senado se perfilaba como una asunto estrictamente proforma, porque la mayoría republicana en el Senado está unida con Trump , “aunque el presidente del Tribunal Supremo, Roberts, que lo preside, puede sorprendernos”, diría Soros.

 

En otro antecedente, Soros tiene un largo historial de pretender deteriorar el sistema legal de Estados Unidos en ese proyecto, en el cual, además, ha invertido muchísimo dinero.

 

En el 2010 llevaba cerca de 10 años en el desplazamiento del Poder Judicial hacia la izquierda a través de su Fundación Open Society Institute, considerado su “brazo político”, de acuerdo con The Washington Times.

 

Igual, un estudio de la American of Justice Partnerships de 2010 señaló que la Open Society Institute invirtió 45.4 millones de dólares en el Sistema de Selección por Méritos, que reduce la influencia de los ciudadanos y sus representantes para elegir a los jueces.

 

En la Selección por Méritos los jueces los selecciona una reducida comisión no elegida, no responsable, compuesta por élites jurídicas y representantes de poderosos grupos de interés que se reúne fuera de la vista del público.

 

Más recientemente, Soros ha invertido millones de dólares más, para que sean elegidos fiscales abiertamente izquierdistas, quienes de hecho relajan la aplicación de la ley en las áreas de su influencia.

 

En este sentido se expresó el presidente de la Cámara de Representantes, dijo Newt Gingrich el 16 de septiembre pasado.

 

La usuaria Lawrence menciona aún más a Roberts en sus tuits planteando otras situaciones incómodas sobre él, acerca de la posibilidad de que sea chantajeado con participaciones en fiestas con el pedófilo Jeffrey Epstein.

 

¿Está siendo chantajeado el presidente de Tribunal Supremo, Roberts?

 

Igualmente, Lawrence muestra una bitácora de vuelo en que aparece el nombre de John Roberts, y pregunta si se tratará del presidente de la Corte Suprema de Estados Unidos.

 

Guerreros intrépidos, como Sidney Powell y Lyn Wood, parecen dirigirse a la Corte Suprema en la batalla para exponer el complot globalista para poder robar así las elecciones a Donald Trump.

 

Diría Lawrence que todos deberíamos estar muy agradecidos de que el voto de Roberts ya no es necesario para mantener la Constitución gracias a Dios, a pesar de la intensa labor de los abogados que defienden la transparencia electoral en Estados Unidos, seriamente perjudicada por manejos fraudulentos la respuesta de los tribunales no se ha decidido aún.

 

El Informe de Peter Navarro, director de la Oficina Política de Comercio y Manufactura, de 36 páginas sobre el fraude electoral que le da la victoria a Trump, tuiteó el presidente su alegría y llamó a manifestarse  el próximo 6 de enero.

 

LA COSA ES QUE…

 

Habría que visualizar, como con anteojos digitales, cómo se vería un Estados Unidos con Biden en la Casa Blanca, y otro con Trump por cuatro años más.

 

Aquí lo hemos dicho hace muchos meses. Es una lucha del Bien contra Mal y no se puede rendir la humanidad en ese proceso.

 

Sin embargo, hágase la voluntad de Dios.

 

Qué tal.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *