COSA DE PRENSA / Las Guerras

Diputado Ignacio Mier Velazco.- Político que no contesta preguntas de periodistas, definitivamente no es político; y eso debe considerarlo con seriedad el electorado poblano en estos tiempos en que la simulación ha dejado de ser una farsa para convertirse en un tremendo insulto a la inteligencia ajena.

 

 

  • ¿Adónde vamos con la guerra de poderes?

  • Ignacio Mier calla ante preguntas incómodas

  • Hablar con sus muertos cambió sus vidas

 

 

Javier Rodríguez Lozano

 

 

CIUDAD DE MÉXICO, miércoles 24 mayo 2023.- Las guerras son cruentas, encarnizadas y a muerte; unas espectacularmente dramáticas, como la ruso-ucraniana, y otras ostensiblemente ocultas, como las del alma, en las que como dice El Principito, “Lo esencial es invisible a los ojos”.

 

Si habláramos de la guerra estaríamos recordando a Roberto Capa, el primer corresponsal gráfico, en 1936 en la Guerra Civil Española, cuando Hemingway escribiera Por quién doblan las campanas, y cuyos archivos fotográficos fueran a caer a manos del general Francisco Javier Aguilar, agregado militar en el consulado mexicano en París, que por órdenes de Lázaro Cárdenas ayudara a salvar miles de vidas españolas que huían de Franco y de Hitler.

 

Y si habláramos de lo que “solo el corazón ve” que nos enseñara el francés Antoine de Saint-Exúpery, estaríamos recordando la necesidad imperiosa de hacer periodismo espiritual, para relatar cómo se están moviendo las piezas del ajedrez humano en otro tipo de imperceptible confrontación, la más cruenta de todas, la de la materia contra el espíritu.

 

Bueno, empecemos:

 

Ayer tarde en el Palacio Legislativo de San Lázaro, en la sala de conferencias “Miguel Reyes Razo”, se ofreció un encuentro entre el coordinador de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco y los medios de comunicación.

 

De pronto, en el techo de la conferencia, escuchamos la pregunta que nos hemos formulado muchas veces; era la voz de Ivonne Reyes, una compañera reportera que recordamos desde la fuente policiaca, en los tristemente célebres tiempos del general Arturo Durazo Moreno.

 

Lo mismo cubríamos lo que ocurría en la Plaza de Tlaxcoaque con Víctor Payán en la jefatura de Prensa, que en los tenebrosos calabozos de la temida DIPD (División de Investigaciones para la Prevención de la Delincuencia) que dirigía Francisco Sahagún Baca.

 

Igual en la Colonia Doctores, donde operaban las mazmorras de José Trinidad Sánchez, jefe de la Policía Judicial donde la Procuraduría General de Justicia tenía como titular a Victoria Adato de Ibarra y en la dirección de Averiguaciones Previas, nada menos que Abraham Polo Uscanga… Puras bellas personitas.

 

El punto es que cuando escuchamos la pregunta de Ivonne nos dijimos: “Está alambicada en los largos años de un esfuerzo, no de roble blanco como los vinos del Rhin, sino del apasionado trabajo del reportero policiaco, que distingue al periodista de quien no lo es tanto.

 

Y por supuesto, el diputado Nacho Mier –que quiere ser gobernador de Puebla- no contestó la pregunta; será porque no supo qué decir y le faltan tablas, o porque es un tema difícil.

 

Lo cierto es que, Mier, el otrora dirigente campesino poblano en los años 90s, inconcluso administrador de empresas y expriista oportunista que luego de diversos cargos de elección popular abandonara el barco cuando ya el agua le llegaba hasta el cuello, en 2006 en que Calderón lo robara la elección a AMLO, se incorporaría a la coalición Convergencia, PT, PRD en busca del Senado, fracasando, y hasta 2017 se sumaría a Morena.

 

Como se sabe, la política, además de servicio, es también espléndido negocio. Nacho Mier brincó desde 2008 del sector campesino a la iniciativa privada, para ser actualmente socio mayoritario, casi propietario de Multisistema de Noticias Cambio, S.A. de C.V., que edita el periódico del mismo nombre.

 

Como tal, Mier Velazco debe saber la enorme falta de respeto que significa no responder a la pregunta de un periodista, aunque no esté de acuerdo con ellos, pero sí obligado como Voltaire, a respetar la forma de pensar de sus semejantes.

 

Recordamos a un Alfonso Martínez Domínguez, que le caían gordo los periodistas, pero no por eso dejaba de contestarles; o a un Jesús Reyes Heroles, siempre con la respuesta adecuada a la mano, además de su inseparable cigarrillo; a un Enrique Olivares Santana, que pedía “amable comprensión” a su tozuda negativa; o a un Ernesto Zedillo, que nunca tuviera amigos periodistas, salvo uno al que salvó de la cárcel por evasión fiscal, y tampoco rechazaba las preguntas.

 

Así que político que no contesta preguntas de periodistas, definitivamente no es político; y eso debe considerarlo con seriedad el electorado poblano en estos tiempos en que la simulación ha dejado de ser una farsa para convertirse en un tremendo insulto a la inteligencia ajena.

 

Y en efecto, la pregunta es: ¿Adónde va México con esta guerra de poderes?

 

 

Todos sabemos adónde vamos; es más, muchos ya estamos ahí, en los peores escenarios que nos enseñan lo burdo de la guerra por el poder terrenal.

 

Como siempre, el espacio conspira y nos deja poco para relatar ahora algo de la guerra espiritual: Es impresionante uno de muchos videos que circulan en Youtube, que relatan tres canalizaciones de una médium, que seguramente cambiarían las vidas de las personas a quienes iban dirigidas.

 

La mayor parte de la gente cree en la muerte –como el pintor José Luis Cuevas- y piensa que ahí acaba todo, pero no es así; para empezar, la muerte no existe, lo que sigue a la extinción de la vida física es el regreso al mundo espiritual, donde la vibración es muy tenue, casi perceptible, en comparación con la terrenal, estrambóticamente densa y escandalosa.

 

Es por ello que los espíritus no pueden comunicarse con facilidad con los seres queridos que dejaron hundidos en mares de llantos e insondables océanos de dolor. Y lo único que ellos quieren decir es que están bien, que no se preocupe nadie.

 

 

En la primera canalización le médium relató a un hijo lo que su padre fallecido quería decirle, por ejemplo, que hiciera lo que quisiera con el negocio que le había heredado. El vástago guardó silencio y solo dijo al final que le interesaba más el mundo del espíritu que el del dinero.

 

En otro caso, una madre recibió el mensaje de una joven hija fallecida seguramente con la ayuda de todo ese personal médico que ayudó a millones de personas en todo el mundo a trascender innecesariamente, pero argumentando Covid.

 

Le chica fallecida le dijo a su madre que cuidara el embrión que ya estaba en su útero –algo que la madre reconoció porque estaba intentando embarazarse nuevamente- y le advirtió que era posible que ella reencarnara ahí. Es decir, que volviera a nacer en su misma madre.

 

Y en otro caso, una joven mujer se contactó con su padre fallecido y además de decirle que la quería mucho, algo que ella dudaba, le compartió una noticia increíble: le dijo que él se hallaba en esos momentos junto su esposa, también fallecida, después de haber pasado mucho tiempo divorciados en la vida terrenal.

 

LA COSA ES QUE…

 

Cualquier puede hablar con sus muertos cuando tienen algo que decir… Nosotros ya no lo necesitamos porque lo sabemos todo y ya nada nos interesa lo demás, gracias a nuestra buena relación con el mundo espiritual.

 

Lo que queremos ahora es ayudarle a la gente, advirtiéndole del mal terrible que se hace a sí misma al no pensar en su crecimiento espiritual, porque no hacerlo se convierte en un verdadero infierno en el momento de morir.

 

Qué tal.

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