En 2016 AMLO destaparía a Nora como candidata de Morena a la gubernatura de Aguascalientes y la bautizaría como “promotora de la soberanía nacional”.
- Proyectan a la “corcholata GobernaNora”
- Pocos saben qué hizo su mano izquierda
- Mas es artífice silenciosa del crecimiento
- Estuvo en la recuperación de 736 mmdp
- Compramos vacunas y hay un superávit
- “Político rico, qué rico político”
Javier Rodríguez Lozano
Viernes 27 agosto 2021.- En política es común que la novatez busque la foto y el pasquín, escasez de ideas que Carlos Hank González definía como: “Político pobre, pobre político”.
En cambio, un profesional discreto no le cuenta ni a su sombra.
Así ha sido Nora Ruvalcaba Gámez en dos que tres momentos de su vida política iniciada poco antes de terminar el siglo pasado, en 1997, y que 25 años después parece que al fin su lucha será recompensada con el justo premio:
-El darma, que el destino reserva a quienes han pagado su karma, porque supieron “tragar sapos sin hacer gestos”, como aconsejaba Adolfo El Viejo, el del dominó en La Parroquia del puerto, donde con la mula de seises espantaba a los aspirantes a la alta burocracia, a los “amigócratas”.
-“Te vas de director de Aduanas, si quieres; pero ya no jugarás dominó conmigo: ¿qué prefieres?”
Como cuando la bajaban de las candidaturas federales como la 2 de Calvillo, de los templetes de AMLO, de la candidatura a alcaldesa que se agandalló el pillo de Arturo Anaya y de la delegación del Gobierno Federal que le cederá Aldo Ruiz el 1 de septiembre próximo.
Soberanos madrazos que pocos aguantan.
No hace mucho, en 2015, el exgobernador Otto Granados Roldán hablaba de Nora Ruvalcaba Gámez a la revista Líder Empresarial y le reconocía oficio, aunque no omitiría reconocer que el adn de Aguascalientes, ultraconservador y de lento aprendizaje, todavía no estaba listo para la izquierda progresista.
Ese, el adn del ultraconservadurismo aguascalentense, va a ser el principal factor contra el que contenderá Nora Ruvalcaba Gámez, no para vencer a la inminente candidata del PAN, Tere Jiménez Esquivel; y a la del PRI, Blanca Rivera Rio, en las urnas del domingo 2 de junio de 2022, sino para lanzar a Aguascalientes no a la Cuarta Transformación, sino más lejos: a la Quinta Dimensión iniciada el 21 de diciembre de 2020, en la que ya se encuentra algo de gente inteligente como ella, que no es mucha, por cierto.
Hace rato que Nora se preparó para la gubernatura de Aguascalientes, aquella aspirante a senadora morenista Guadalupe Martínez Vázquez que la bajaba de los templetes del candidato presidencial de Morena, nunca se enteró que Andrés Manuel López Obrador, cuando venía a Aguascalientes se registraba en hoteles pero pernoctaba en la casa de Nora y Fernando Alférez, sus “cuadernos de doble raya”.
En una de aquellas ocasiones, por ahí de mediados de agosto de 2016, AMLO destaparía a Nora como candidata de Morena a la gubernatura de Aguascalientes y para que no lo acusaran de “actos anticipados de campaña”, la bautizaría como “promotora de la soberanía nacional”.
Después de aquella expresión era claro que la mujer política más cercana al entonces aspirante presidencial, López Obrador, era Nora, licenciada en Ciencias Sociales y en Derecho Constitucional, candidata a gobernadora y senadora en 1997 y 1998, y en 2018 nadie entendió por qué Aldo Ruiz la desplazaba.
Sin duda, fue una jugada de su hábil e insuperable maestro; no, Fernando no; el otro.
Citamos antes a Otto Granados, publicado su comentario el 13 de octubre 2015 en Líder Empresarial, hablaba de Ruvalcaba y decía que “lamentablemente para Nora, y no es por responsabilidad de ella, sino la de su partido o sus partidos; es curioso que en Aguascalientes por razones históricas, culturales, quizás antropológicas, una opción de izquierda nunca ha tenido demasiado peso y yo creo que habría sido enriquecedora”.
Diría también:
“No deja de ser una casualidad que, por ejemplo, toda la corriente de los Chuchos en el PRD que son de aquí (lo que no es exacto, porque Jesús Zambrano Grijalva es sonorense, aunque Jesús Ortega sí), pues nunca hayan tenido, digamos, más peso político, mas (sic) punch electoral, mejores resultado electorales, en fin, lo atribuyo a que quizá no está en el ADN de Aguascalientes una simpatía por opciones de izquierda más liberales, de más toma de posición de algunos de los temas que mencionábamos al principio: aborto, uniones libres, derechos humanos de tercera generación, etcétera, etcétera, que son los que normalmente enarbolan las izquierdas o los actores liberales en muchas partes del mundo y que aquí en Aguascalientes todavía es un anatema.
“Creo que son temas saludables para el estado, entonces siendo temas de izquierda, sería muy interesante que la izquierda tuviera un levantón en las próximas elecciones”.
Este fenómeno sociopolítico nunca fue tomado en cuenta por Nora Ruvalcaba Gámez en todas sus pasadas contiendas electorales, que no son pocas, en las que hablaría del proyecto alternativo de nación, de quitarles el agua a las empresas extranjeras y devolverla al pueblo de Aguascalientes, principal promesa incumplida de Tere Jiménez; eliminar exenciones de impuestos y que las trasnacionales paguen salarios justos
En su campaña por la gubernatura 2022 Nora recordará a sus electores que, “la clase política en el poder deberá garantizar la igualdad de oportunidades, el rechazo a la exclusión, la discriminación y los privilegios. Al triunfo de Morena en Aguascalientes se abolirá la corrupción, la impunidad, el abuso de poder, la colusión de las autoridades y los conflictos de interés so pena de revocación de mandato y sujeción a proceso”.
El 12 enero 2019, Carlos Urzúa Macías, entonces secretario de Hacienda, invitaría a Nora a incorporarse al equipo de Enajenación de Bienes del SAT y de inmediato tomaría posesión de su cargo.
Para el 3 diciembre de 2020, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) informaba la recuperación de 736 mil millones de pesos de adeudos de los contribuyentes en los primeros dos años del sexenio, una cifra que permitió al Gobierno garantizar los recursos para la atención de la pandemia y que refleja el esfuerzo de fiscalización que organismos como Fitch y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han reconocido.
Una gran suma de aquella macro cifra se integraba por el trabajo de Enajenación de Bienes a cargo de Nora, una labor discreta, silenciosa y callada, pero de gran efectividad en momentos de coyuntura, que son los que distinguen al político experimentado, es decir; aquellos en los que más se les necesita.
En Aguascalientes, como en todos los estados del país, poderosos grupos económicos que incluyen al crimen organizado también hacen campaña; de uno de ellos -el que ya perdió dos elecciones seguidas- surgiría en días pasados una carambola de dos simples bandas que a nadie convenció: quisieron pegarle a Nora y al gobernador Martín Orozco, divulgando un audio en el que ambos pactaban bloquear al empresario fuereño Arturo Anaya.
Los autores ya sabían por dónde venía la jugada.
LA COSA ES QUE…
La Sucesión Aguascalientes 2022 entró ya a su punto más álgido, lo que siga será morralla, es decir, monedas de 15 centavos: La candidata del PAN será Tere Jiménez, la del PRI-PRD Blanca Rivera Rio y la de Morena, Nora Ruvalcaba Gámez.
Las principales credenciales de la ya exalcaldesa capitalina Jiménez Esquivel no tienen desperdicio, aunque le faltó lo del agua; Blanquita no tiene, el priismo no da para más.
Y las de Nora, pues casi nada: su trabajo en el SAT fue, además, parte importante en la recaudación adicional de 467 mil millones de pesos durante 2020, equivalentes al 2.3% del PIB, que motivaron el citado reconocimiento de la comunidad financiera internacional, como ya dijimos.
Pero además, sin necesidad de que tome posesión como gobernadora, lo que deberá ocurrir el 1 de diciembre de 2022, Nora Ruvalcaba Gámez como superdelegada superará en los próximos meses, los apoyos del gobierno de Andrés Manuel López Obrador que con esta administración panista estuvieron en la congeladora.
Y con eso Aguascalientes ya está ganando, porque “poderoso caballero es don dinero”…
Y “político rico, qué rico político”.
¿O no?
Qué tal.