- Trump les tendió una fina trampa
- Más que irreversible gran victoria
- Políticos, países y la gran prensa
- Elecciones, Emergencia Nacional
- Activos cómplices están en juego
- Mente maestra de Donald Trump
Javier Rodríguez Lozano
Miércoles 18 noviembre 2020.- ¿Sabía usted que la propiedad de los grandes medios de comunicación mundiales, promotores del fraude electoral estadunidense -como El País-Televisa y El Universal-, podría pasar al Gobierno de Estados Unidos?
Así lo establece la Orden Ejecutiva 13848 del Presidente Trump, firmada el 12 de septiembre de 2018 que decreta una Emergencia Nacional aún vigente, “Sobre la imposición de ciertas sanciones en caso de interferencia extranjera en una elección de los Estados Unidos”.
Al igual que Charles Darwin con la evolución de las especies, Julio Verne con los viajes a la luna o Nostradamus con sus profecías, la visión de Donald Trump descubriría en 2016 aviesas intenciones y se prepararía para defender a Estados Unidos del amenazantemente defraudador Orden Mundial en 2020.
COSA DE PRENSA postuló en torno a las elecciones de EEUU el 9 de noviembre pasado: “Hoy sorprenderán al mundo” y el 11 siguiente lo explicamos: “El lunes dijimos que en ese día se produciría una información que sacudiría al mundo.
“Pues bien, esa información es que la Fiscalía General estadunidense declaró que investigará la votación y de hallar anomalías graves podría modificarse el resultado electoral.
“Hasta ayer había tres mil 62 anomalías demócratas registradas con declaraciones juramentadas, que una vez dictaminadas por los Tribunales, arrojarán que Biden no ganó las elecciones”.
Lo que no dijimos entonces y detallamos ahora es que aquella “información que sacudiría al mundo”, era con la que el Fiscal General, William Barr, iniciaba su trabajo de investigar el fraude electoral, mandatado en aquella Orden Ejecutiva en la que el Presidente Trump tendía una sofisticada trampa a sus aguerridos adversarios.
Ese documento presidencial de Trump Involucra a las más altas esferas de poder del también llamado Estado Profundo, a la CIA y a los grandes medios de comunicación del mundo.
Este lunes 16 noviembre dijimos aquí que “un error lingüístico puso a Trump al borde del precipicio, pero la presunción de que el software Dominion del que es copropietaria Hillary Clinton le robó 38 millones de votos, lo resucitó en el tablero de ajedrez electoral más turbio de toda la historia”.
Resulta que se está documentando cómo fue perpetrado el fraude electoral cibernético más colosal de Estados Unidos y también su presencia en elecciones de otros países.
¿Por qué esto es relevante?, se pregunta el portal tierrapura.org al citar a las empresas Dominio Voting Systems en Canadá y Scytl española, sospechosas de “interferencia extranjera… por cierto está conectada con George Soros y los Demócratas, y según el Pundit de Gateway, ‘Bill Gates también posee acciones de Scytl”.
Añade que los votos fueron contados por una compañía española en bancarrota, que “al igual que Dominion Voting Systems, Scytl tiene una larga historia de fraude electoral en varios países incluyendo la inyección de filtraciones en su software electoral”.
Debido a este fraude tan extendido, el presidente de la Comisión Federal de Elecciones de EEUU Trey Trainor cree que las elecciones presidenciales de 2020 son ilegítimas, subraya tierrapura.org.
Dato sobresaliente también es que dicha Orden Ejecutiva de Trump faculta al Departamento de Justicia a confiscar bienes de “los individuos y compañías que fueron cómplices en ayudar o encubrir esta interferencia extranjera en las elecciones”.
Continúa el relato del citado portal tierrapura.org que ahora, el Equipo Trump reúne “pruebas irrefutables de colusión criminal para llevar a cabo la interferencia electoral.
“Y las pistas de encubrimiento conducirán directamente a los gigantes tecnológicos (censura selectiva y colusión con China) y a los falsos medios de noticias de izquierda (campaña de propaganda para encubrir las pruebas de colusión extranjera)”.
Esto significa que -puntualiza- de un solo golpe, el presidente Donald J. Trump podrá:
1- Arrestar y confiscar los bienes de todos los principales demócratas y traidores del Estado que intentaron robar las elecciones de 2020.
2- Tomar todas las corporaciones de los gigantes tecnológicos y los medios de propaganda de izquierda que fueron cómplices de la conspiración. (Twitter y Facebook comparecieron ayer martes ante el Senado).
3- Derrotar al Comité Nacional Demócrata para siempre revelando pruebas abrumadoras de fraude electoral generalizado, lo que también dará lugar a un llamamiento en todo el país a favor de un sistema de identificación de los votantes para todas las elecciones futuras.
LA COSA ES QUE…
Y 4, “Solidificar su propia posición como la brillante mente maestra del Presidente de los EE. UU. para un segundo mandato (y tal vez un tercero, nos atrevemos a decir)”, festejaría por adelantado el portal tierrapura.org.
Qué tal.