- Ya no nos dicta la política económica
- Que dejen ya de rescatar a empresas
- No solapen más gobiernos corruptos
Javier Rodríguez Lozano
Domingo 11 octubre 2020.- El Mandatario ha dicho en sus mañaneras del pasado fin de semana que respeta mucho al Fondo Monetario Internacional, “y (no) les vamos a dar ninguna recomendación a ellos porque va a estar muy difícil que nos hagan caso.
“Lo único que les pedimos es que nos respeten; que somos libres y somos soberanos, y que ya no son los organismos financieros internacionales los que dictan la política económica en México, como era antes”.
Y le recomendó: “Que procuren darle crédito a los gobiernos que lo solicitan a tasa cero, que ya dejen de estar rescatando a las grandes corporaciones y rescaten a los pueblos; en fin, que dejen de estar solapando a gobiernos corruptos”.
El viernes el Canal 14 le preguntó sobre los pronósticos de Agustín Carstens, gerente general del Banco de Pagos Internacionales, quien “mencionó que se avecina una crisis de bancarrotas”.
No precisó su pregunta el reportero, porque Carstens se refirió al sistema bancario, no a bancarrotas en general, y por eso el Presidente tampoco centró sus respuestas. Diría:
“Sí, yo creo que él se refería a que se optó en varios países por más de lo mismo, se aplicó la receta de dar prórrogas en el pago de impuestos, rescatar a empresas, contratar deuda y eso la verdad es que no ha servido”.
Sin embargo, reconoció el Presidente:
“No es un asunto sencillo, es una crisis económica que no se veía, en el caso de México desde los años 30 del siglo pasado; igual que en Estados Unidos, esto data de la Gran Depresión o la crisis actual, es similar al crack del 29, del 33 en Estados Unidos”.
He aquí uno de esos pasos cortos de un largo recorrido, el de la geopolítica, donde se nota el trastabilleo, como que se mueve el piso. La preguntaron si lo de Carstens es para tomar en cuenta, o algo así, y dijo el Ejecutivo:
“Sí, en esa visión de la estrategia que ellos han aplicado, en la fórmula de ellos, lo que está diciendo es cierto, o sea, esas economías no están reaccionando a pesar de los estímulos.
“En el caso de nosotros, no creo que se haya referido a nosotros, porque nosotros no soltamos dinero a empresas ni estímulos fiscales, nada de eso, fueron los apoyos abajo.
“Los Programas de Bienestar, los créditos a las pequeñas empresas, el apoyo de las remesas, que eso sí nos ha llegado como una bendición, nos ha apoyado mucho.
“Entonces, no creo que se haya referido a nuestro… sino en general, creo que a cómo se está enfrentando la crisis en el mundo, creo que ese es su, su… A eso se refería, a cómo se está enfrentando la crisis; no se ve que les vaya a funcionar”.
Nosotros creemos que sin duda alguna. tendrá que incorporarse al gabinete de seguridad previo a las mañaneras un experimentado geopolitólogo (Alfredo Jalife o Alicia Bárcena) que ayude al Presidente AMLO a ubicarse en estos escabrosos escenarios mundiales, donde desde antes de Marshall McLujan, ya no había vecindades distantes y como en los pueblos, nos conocemos todos y a todos nos duele lo mismo.
Vayamos a lo prometido, las raíces, los cimientos del Orden Mundial fundado en 1954 con el nombre del Club Bilderberg, “los amos del mundo”, en opinión de Cristina Martín Jiménez, de cuyo espléndido trabajo hablaremos en otra ocasión:
En el cuarto párrafo (que nosotros multiplicamos) de su Prefacio, Daniel Estulin dice en su libro Los secretos del Club Bilderberg, que en cualquiera democracia moderna se protege el derecho a la intimidad. Mas se pregunta:
“¿Pero el público tiene derecho a saber de qué hablan los más importantes presidentes, primeros ministros, reyes y reinas de todas las casas europeas cuando se reúnen con los empresarios y banqueros más ricos de sus respectivos países?”
También se cuestiona: “¿Qué garantías tienen los ciudadanos de que el Club Bilderberg no es un centro de tráfico de influencias y de cabildeo si no se les permite conocer de qué hablan allí sus representantes?”
¿Por qué -se pregunta Estulin- el Foro Davos (de Suiza) y las reuniones del G8 (Grupo de los Ocho) aparecen en las portadas de todos los periódicos y se permite el ingreso de miles y miles de periodistas…?
Pero, en su más extensa interrogante: “¿Por qué nadie (reporteros) cubre las reuniones del Club Bilderberg, a pesar de que a ellas asisten regularmente los presidentes de entidades financieras como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la Reserva Federal y el Banco Central Europeo…
“Presidentes de las empresas más poderosas como DaimlerChrysler, Coca Cola, PepsiCo, Ford, General Motors, Novartis, Astra-Zeneca, British Petroleum, Shell, Chase Manhattan Bank, UBS Warburg, Soros Fund Management…
“Kissinger Associates, Nokia, Motorola, Ericsson, American Express, France Telecom, German Telecom, British Telecom, Goldman Sachs, Lazard Fréres, Deutsche Bank, JP Morgan, Xerox, Microsoft, Oracle, EADS…
“Secretarios de Defensa y vicepresidentes de Estados Unidos, representantes de comités nacionales democráticos y republicanos estadounidenses, directores de la CIA y el FBI, secretarios generales de la OTAN…
“Todos los comisarios europeos, senadores y congresistas estadounidenses, primeros ministros europeos y líderes de partidos de oposición, gobernadores de todos los bancos centrales de todos los países europeos…
“(Y) los principales editores y los directores de los periódicos más importantes del mundo?” (El único que no ha faltado a una sola de sus 65 sesiones de trabajo desde su fundación en 1954 es el Grupo Prisa que edita el periódico El País).
Y qué casualidad, decimos nosotros, la asamblea Bilderberg número 66 era la de 2020, que se canceló por la crisis creada por él mismo, igual que la de una década atrás, cuando el anfitrión, el Príncipe Bernardo, de Holanda, fuera descubierto recibiendo moches por la venta de armas.
Para Daniel Estulin -como para otro respetable puñados de cronistas del Club Bilderberg, como la ya citada española Cristina Martín Jiménez- resulta sorprendente:
“Que pocos medios consideren que una concentración de personalidades no sea noticia, cuando en cambio, cualquier viaje de algunos de ellos en solitario suele llegar a los titulares de las noticias en televisión”.
LA COSA ES QUE…
Los nombres y las empresas citadas por Estulin en Los secretos del Club Bilderberg son las raíces, los cimientos, la etimología, la génesis del Orden Mundial.
Luego documentaremos cómo estructura su Gobierno Global para, a través de él, decirle al mundo qué papel debe desempeñar cada uno de sus más de 200 países, 194 de ellos -México inclusive- alineados por el sistema financiero a través de sus créditos, a la ONU y sus agencias como la hoy de moda OMS, que nos recomienda comprar la vacuna de Astra-Zeneca y la de Microsoft de Gates & Soros.
Y también, cómo Naciones Unidades ha estado antes y después, en el desarrollo y epitafio de todos y cada uno de los conflictos mundiales, desde la Guerra de Corea en 1950-1953, el primero, hasta el actual de Armenia y Azerbaiyán en este 2020.
Qué tal.