- De Eisenhower a Trump
- Proclama triunfo en Georgia
- Integridad o no hay liderazgo
- Debatirán semanas o meses
- Después del 14 de diciembre
- Joe Biden no será presidente
- Powell y el tráfico de boletas
Javier Rodríguez Lozano
Domingo 6 diciembre 2020.- Desde aquel 1942 en que el general Dwight D. Eisenhower exaltara a la integridad como el valor supremo, al asumir como Comandante en Jefe de las Fuerzas Aliadas en la Segunda Guerra Mundial, ningún presidente la privilegiaba tanto como hoy Donald Trump.
Ese sábado encabezó un “mitin de la victoria” con Valdosta, Georgia, donde se proclamó ganador de ese estado, en el ue se halló el más colosal fraude electoral que registre la historia de la democracia universal.
En días pasados el presidente Trump emitió emotivo discurso, diría:
-Estamos pasando por una situación difícil como ya sabemos. Como presidente no tengo mayor deber que defender las leyes y la Constitución de los Estados Unidos de América.
Por eso estoy volcado en proteger nuestro sistema electoral, el cual está ahora cercado bajo el dominio de un asalto coordinado durante meses, enfocado en destruir las elecciones.
Pero estábamos alertados sobre ello. No debemos declarar una victoria prematuramente. Decimos de forma reiterada que necesitamos semanas, incluso meses, para determinar el ganador y contar los votos ausentes y verificar los resultados.
A mi oponente se le dijo que estuviera lejos de las elecciones, que no hiciese campaña; “no te necesitamos, no necesitamos la campaña, los tenemos. Estas elecciones están hechas”. De hecho, estaban actuando como si supiesen lo que iba a suceder.
Lo tenían todo hecho y cubierto, bien planificado, y esto es muy triste para nuestro país. Fue todo muy extraño, durante días después de las elecciones fuimos testigos e hicimos un esfuerzo conjunto para verificar quién fue el ganador.
Aunque muchos estados clave estaban contando el proceso electoral debía continuar.
Vamos a defender la honestidad de los votos, aseguraremos de que cada voto legal será contado y de que cada voto ilegal será contado, para poder sacar la verdad a la luz.
Esto no lo hacemos por honrar los votos de 74 millones de americanos que votaron por mí, es para asegurarnos de que los americanos puedan tener fe en el proceso electoral y en todas las futuras elecciones de los Estados Unidos.
Voy a detallaros hoy algunas cosas espeluznantes que fueron estas irregularidades abusos y fraude que han sido revelados a lo largo de estas semanas. Antes sacaremos algunas pequeñas evidencias que hemos descubierto y puedo aseguraros que tenemos muchas evidencias.
Quiero explicaros el sistema de votos tan corrupto que los demócratas han utilizado sistemáticamente. Ellos han permitido que los votos hayan sido alterados en los estados oscilantes, donde por supuesto que tenían que ganar.
Ellos no se imaginaban que iba a ser tan duro porque estábamos ganando en todos estos estados y por muchos votos, tantos que ni se lo podían imaginar.
Es completamente incomprensible que un engranaje político democrático se vea envuelto en un fraude como éste. Desde Detroit hasta Filadelfia, Milwaukee, Atlanta y muchos otros lugares.
Pero lo que ha cambiado este año han sido las implacables partidas para presionar e imprimir millones de votos a desconocidos con ningún tipo de seguridad en la red, seguridad virtual.
Este fraude ha permitido y ha ocurrido a una escala tal que nunca se había visto con anterioridad y han utilizado la pandemia como pretexto para poder perpetrarlo.
Los políticos demócratas y los jueces cambiaron drásticamente los procedimientos electorales meses antes, incluso semanas antes de las elecciones del 3 de noviembre. Muy raras veces estaban involucradas las legislaturas y constitucionalmente tenían que estar involucradas.
Pero es muy, muy raro, y lo veréis en la medida en que continuemos en esta lucha, en lo nuestro. Veréis que fue absolutamente inconstitucional lo que tuvo lugar en las elecciones desde un punto de vista legal.
Muchos estados como Nevada y California establecieron millones de boletas en vivo para cada persona en sus listas de votantes, mientras estos individuos a lo mejor, no las habían solicitado, o a la mejor estaban muertos.
No importaba, ellos tenían que hacer boletas.
Otros estados como Minnesota, Michigan, Wisconsin, instituyeron “el voto ausente universal” a mitad de este año electoral, enviando formularios de votación a todos votantes en todos los sitios sin importarles quiénes eran.
Esta colosal expansión del voto por correo, por supuesto, abrió las compuertas para un fraude masivo.
Es por todos conocido el hecho de que las listas de votaciones estaban llenas de personas que no fueron elegidas legalmente para vota, incluyendo muertos, personas que se habían mudado a otros estados; incluso personas que no eran ciudadanos americanos.
Más allá de estos registros hay que ver que estaban plagados de errores, direcciones incorrectas, entradas duplicadas y muchos otros problemas. Esto no se disputa, nunca se ha disputado.
Decenas de condados en los estados clave tenían más votantes registrados en las listas que ciudadanos en edad de votar, incluyendo 67 condados en Michigan.
Todas estas evidencias en Wisconsin, la Junta Electoral del Estado no pudo confirmar la residencia para más de 100 mil personas, pero se negó repetidamente a eliminar esos nombres de sus listas de votantes antes de las elecciones; ellos sabían por qué.
Ellos sabían perfectamente por qué lo hacían; yo también sabía por qué lo hacían. Porque eran votos ilegales.
Es una farsa que en el año 2020 no tengamos ningún medio tecnológico para verificar la elegibilidad de los que votaron en una elección tan importante o determinar quiénes son: Si viven en el estado, o si son incluso ciudadanos americanos, o si están muertos; no tenemos ni idea.
Tenemos en todos los estados de transición situaciones graves o fraude absoluto, que es mucho más en número o votos de los que necesitamos para anular los resultados en el estado. (mostró una gráfica).
En otras palabras, en Wisconsin por ejemplo, en medio de la noche de las elecciones nos hicieron perder “milagrosamente” por 20 mil votos y yo puedo enseñaros aquí mismo que Wisconsin, por ejemplo, en este estado estábamos ganando y por mucho, y de repente, a las tres y 42 hubo esto: un vertedero masivo de votos para Biden.
Y desde ese día muchos están tratando de aclarar de dónde vinieron todos esos votos.
Pero yo sé que estaba ganando y por mucho hasta caer y estar perdiendo por muy poquito. Y esto es lo que ha sucedido exactamente a las tres y 42 en Wisconsin, una cosa terrible, terrible, terrible.
Pero pronto tendremos más de los 20 mil votos que necesitábamos para voltear el estado a nuestro favor.
Si estamos en lo correcto acerca de este fraude, Joe Biden no puede ser presidente -concluyó el presidente Donald Trump.
LA COSA ES QUE…
Mientras tanto, México tendrá que investigar de dónde salieron las boletas falsas que siguen cruzando la frontera hacia Estados Unidos, según denunció Sidney Powell, una de las brillantes abogadas que denuncian el fraude electoral.
Entrevistada por Sean Lin, de Brave Hearts, la jurista comentó tener pruebas de boletas falsas provenientes de China.
“Escuchamos un video de alguien pidiendo boletas desde China. Tenemos evidencia de una gran cantidad de boletas entrando y tenemos un testigo que ha dicho que continúan ingresando porque tienen intención de ejecutar boletas falsas en cualquier segunda de vuelta (de elecciones a legisladores) o si las necesitan también en los recuentos”.
Powell dijo tener también de boletas que se transportan a través de la frontera de Estados Unidos y México.
Qué tal.
