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AMLO quiere ir más allá de lo imposible
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Separar al Estado del poder económico
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Es el que manda realmente en el mundo
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Será principal eje sexenal de Sheinbaum
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., viernes 10 de mayo 2024.- Si la separación del Estado y la religión católica sería icónica en nuestra historia con Benito Juárez, en la Reforma de 1857, Andrés Manuel López Obrador quiere ir más allá de lo imposible: Separar al poder político del poder económico.
Materialmente imposible, y explicaremos por qué; sin embargo, ese nuevo matiz de la ciencia política moderna será el eje central del sexenio de Claudia Sheinbaum que instalará, no a ella ni a su antecesor, sino a México, en un lugar privilegiado de la historia universal, porque nadie ha intentado algo semejante.
Nadie, en ninguno de los 200 países alineados a uno de los más importantes bastiones, sino es el que más, de ese poder económico global, llamado Organización de Naciones Unidas (ONU), con influencia a los lados, arriba y debajo de la última de las piedras del planeta tierra, sin que nadie se oponga.
Casi, casi, podríamos imaginar una Guerra de Troya, hipotéticamente ganada por Paris, cortándole la cabeza a Menelao, a quien le arrebata a su esposa, la mujer más hermosa de Grecia, hija de Zeus, Helena, por pura voluptuosidad; y a su hermano Héctor, arrastrando a un humillado Aquiles… Es decir, algo imposible, porque los Aquiles, los Odiseos, los Diómedes, los Ajaxes y los Agamenónes de la Cuarta Transformación, no se dejarán vencer por sus amenazantes adversarios, además de Paris y Héctor, los Eneas y las propias Helenas, prototipo de la tanguera y gardeliana “Traición de mujer” en Tomo y obligo.
En su primer informe de gobierno, el 1 de septiembre de 2019, López Obrador propondría separar al poder político del poder económico,
Ahí estaban, en primera fila y muy cerca, los empresarios Carlos Slim, María Asunción Aramburuzabala, Germán Larrea, Joaquín Vargas Gómez, Alfredo Harp Helú y Emilio Azcárraga Jean, entre otros.
A las figuras líderes del poder económico en México, el Presidente les diría con todas sus letras, que es el Estado el que tiene la responsabilidad de promover y encausar el desarrollo económico nacional, “así como de criticar el periodo neoliberal aplicado en los últimos 36 años, en el que predominó la corrupción pública y privada”.
López Obradora subrayaría que existe aún, “la idea falaz de que el Estado no debe promover el desarrollo, ni buscar la redistribución del ingreso, sino limitarse a crear las condiciones que permitan a los inversionistas hacer negocios y asumir que los beneficios se derramarían automáticamente al resto de la sociedad”.
Esta suposición, lamentó el Mandatario, se reveló cruelmente falsa durante el periodo neoliberal.
Aseguraría Andrés Manuel que, “con el nuevo gobierno federal ya es un hecho la separación del poder político del poder económico”.
¿Por qué?
Porque -diría- El Gobierno de México impulsa acciones para que las instituciones gubernamentales no sean usadas, para que las instituciones gubernamentales no sean usadas para el servicio de los intereses corporativos (empresariales ni mediáticos) ni para consolidar fortunas”.
Y enlistaría el Mandatario los principales escenarios al respecto:
-En la nueva administración federal existe una estricta vigilancia a los conflictos de interés, se llevan a cabo reformas legales y se vigilan procesos electorales.
-El pésimo diseño institucional para la rendición de cuentas ha permitido que los funcionarios públicos puedan faltar a normas como la establecida en el Código Penal Federal o la Ley General de Responsabilidad Administrativas, que advierten que los funcionarios públicos tienen prohibido participar en decisiones gubernamentales donde tengan un interés.
-Se han promovido cambios jurídicos para sancionar los conflictos de interés, se promueve un mayor cumplimiento en las declaraciones de situación patrimonial de los servidores públicos y promueven condiciones de mejor contratación pública.
El 21 de junio de 2023, en su conferencia de prensa mañanera, el Presidente López Obrador reiteraría que su gobierno avanzó en la separación de los poderes económico y político, y subrayaría:
“Quienes eran los hijos predilectos del régimen han ido entendiendo que son otros los tiempos”.
No obstante, reconocería que aún es necesario continuar en ese esfuerzo, porque “el objetivo es pasar de una oligarquía, en la que el Presidente era ‘títere, pelele’, a una verdadera democracia”.
Y relataría algunos detalles de su relación con ciertos hombres del poder económico, del sector empresarial, “y con algunos de los grupos económicos más poderosos del país”.
Compartiría que el finado Alberto Baillères buscó un acercamiento con el gobierno para establecer nuevos vínculos, y que le dijo: “quiero ayudar en esta nueva etapa porque creo en lo que está haciendo”.
Ahí se estableció una relación respetuosa con Alberto Bailleres, con quien se reuniría poco antes de su deceso en 2022 en que le solicitaría al Presidente que ese nuevo trato se prolongara a su hijo Alejandro Bailleres, quien presidiría el Grupo Bal; “Ahí se lo encargo, Presidente”, le pediría. Y así ha sido, ha continuado esa buena relación que en diplomacia se llama “bilateral”.
Destacaría también el Presidente en la citada mañanera, su relación con Carlos Slim, “quien ha actuado de manera institucional”.
Y resaltaría de manera más enfática, que desde el inicio de su administración quedaron prohibidas las condonaciones fiscales, un tema que -no lo dijo, pero es real- el que muchas grandes fortunas de México tienen sus raíces ahí, como las de Banco Azteca y el Grupo Elektra, para no ir lejos.
Recordó que su gobierno le dijo a José Antonio Fernández, de OXXO, que debía 12 mil millones de pesos y que los tenía que pagar; y los pagó.
Relataría otra anécdota según la cual, Enrique Peña Nieto llegó a sentirse traicionado por el sector privado, y la iniciativa privada también se sintió traicionada por el Presidente; fue cuando le empezaron a criticar con aquello de ser “el payaso de las cachetadas”. Y es que EPN suspendería la condonación de impuestos y le llovieron los jitomatazos empresariales.
LA COSA ES QUE…
No es imposible obligar a los causantes a que paguen sus impuestos, no es nada complicado, simplemente se aplica la normatividad correspondiente y a pagar, no hay de otra; pero eso no quiere decir que se ha separado el poder político del poder del Estado.
A siete meses de que concluya su administración, será materialmente imposible que se haya separado el poder político del poder económico. ¿Por qué no? Porque Ricardo Salinas Pliego seguirá burlándose del gobierno federal, al no pagar sus impuestos, y con ello ha “incentivado” a muchos empresarios a que hagan lo mismo.
¿Por qué es imposible separar al Estado del poder económico?
Se lo explicamos en nuestra siguiente entrega, en la que le hablemos sobre quién manda en México y el mundo, y no son de ningún modo, ni los presidentes, ni los jefes de Estados, ni los primeros ministros, ni los reyes; no, es precisamente el poder económico global, del cual le hablaremos en la que sigue.
¡Feliz Día de las Madres!
Qué tal.