- La “mafia del poder” camionero
- Con 1.00 ganarían una millonada
- Nadie pone orden: Netza Ventura
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., viernes 1 de diciembre de 2017.- A Aguascalientes le llueve sobre mojado, no le basta a la población los preocupantes índices de inseguridad, como bien proclama el regidor Netza Ventura Anaya, sino que ahora se vendrá en enero de 2018 una cascada de aumentos de precios a los productos y los servicios básicos, como el autobús urbano… Veamos Desde 1993 y hasta noviembre de 2016, se han dado 16 aumentos a las tarifas, todos condicionados a la modernización del parque vehicular y mejora del servicio, sin que ninguno de ellos haya cumplido la Alianza de Transportistas Urbanos y Suburbanos de Aguascalientes (Atusa)… Con datos de la Secretaría de Gestión Urbanística y Desarrollo Territorial (Seguote), COSA DE PRENSA le presenta amable Lector, los aumentos de los últimos 24 años: 1) 14 junio 1993, de 90 centavos a un peso 20 centavos; 2) 1 marzo 1995, a 1.50; 3) 4 diciembre 1995, a 1.70; 4) 12 mayo 1996, a 1.80; 5) 29 diciembre 1996, a 2.00; 6) 28 diciembre 1997, a 2.20; 7) 16 octubre 1998, a 2.50; 8) 8 julio 1999, a 3.00 pesos; 9) 10 julio 2000, a 3.30; 10) 19 febrero 2001, a 3.60; 11) 22 abril 2003, a 4.00; 12) 8 octubre 2003, ¿a 4.50? –se olvidó la dependencia de registrar el aumento-; 13) 17 enero 2006, a 5.00; 14) 15 octubre 2009, a 5.50; 15) 10 agosto 2010, a 6.00; y 16) noviembre 2016, a siete pesos con 50 centavos… En 1993 gobernaba Aguascalientes Otto Granados Roldán y en su sexenio aumentó la tarifa camionera en siete ocasiones, al pasar de 90 centavos hasta 2.50 (1.60 en total); Felipe González autorizó subir el pasaje en cinco ocasiones, de 2.50 a 5.00 (2.50); Luis Armando Reynoso Femat aprobó tres incrementos, de 5.00 a 6.00 (1.00); y Carlos Lozano de la Torre solo uno, hasta 7.50 (1.50). Antes de las elecciones de 1994 Otto ejecutó el primer “aumento electorero”, Felipe González, el segundo en 1999, aunque éste “de agradecimiento” (como pretende ahora Martín Orozco Sandoval), igual, aunque algo tardío el de Luis Armando Reynoso Femat en 2006, pero no tanto como el de Carlos Lozano que tardó casi sus seis años… Ayer entrevistamos a un chofer de autobús urbano que cubría la ruta de Ojocaliente al penal. Nos dijo que el nuevo aumento debe ser de un peso a uno 50. Y explicó con toda claridad: “Hay rutas pobres y rutas ricas, que van de los 450 a los 800 pasajeros al día, pero si promediamos a unos 600 veríamos que con un peso de aumento el concesionario ganaría por cada uno de sus 30 camiones 600 pesos. Toda su flota ganaría 18 mil pesos diarios, 180 mil a la decena o 540 mil pesos al mes. ¿Y el chofer? A nosotros solo nos aumentarían 50 pesos diarios, o sea, unos 1,500 mensuales. Todo es para el patrón, es una mafia del poder camionero, nomás”.
LA COSA ES QUE…
En todos los 16 aumentos al pasaje de los autobuses urbanos en el último cuarto de siglo, los concesionarios se han comprometido a la modernización de su flota vehicular y a mejorar el servicio. Quienes saben del método, como los académicos y la parte oficial, se han negado a investigar las enormes cantidades de dinero que pierden la industria, el comercio, empleados, trabajadores y usuarios en general, por las tardanzas del pésimo transporte urbano, al que nadie le quiere entrar a poner orden, como nos dice el regidor Netza Ventura Anaya; qué tal.
