- Que ahora sí va a trabajar
- Juan Pueblo no se engaña
- ¿Y lo del Hospital Hidalgo?
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., sábado 30 de septiembre de 2017.- Hay días en que deliberadamente no dan ganas de escribir y no es por flojera, sino porque hay tanto que escribir que sentimos un desperdicio “quemar” los temas sobresalientes en un fin de semana, un sábado, cuando la lectura de escritos periodísticos disminuye muy sensiblemente. Entonces escribir se convierte en un desperdicio, pero como nos formamos en un conjunto de reglas que nunca toman vacaciones, entonces hay que cumplir y escribamos… Qué pena que los mismos legisladores del Partido Acción Nacional en la LXIII Legislatura digan que ahora sí va a trabajar el gobernador. Eso se debe a su chabacanería, es decir, a su lamentable ingenuidad en asuntos políticos. Es una realidad que la percepción ciudadana sobre el rumbo que lleva al estado de Aguascalientes no es muy halagüeña. En días pasados abordamos un taxi que manejaba una persona corpulenta, pero muy amable y más que eso, conocedora de las cosas públicas. Del espejo retrovisor de su vehículo colgaba un escudo militar y el corte casquete corto de su cabello nos decían que se trataba de alguien con pensamiento militar. No nos equivocamos. Surgió la conversación por la parte más sensible: la inseguridad, los robos, los aumentos en los diferentes géneros delictivos. “¿Por qué cree usted que el gobernador no sale a la calle, casi nadie lo ve y quién sabe si trabaje?”, nos preguntó el taxista. Antes de que le contestáramos él se nos adelantó y dijo: “Porque él mismo no se la cree que sea gobernador”… ¿Y por qué no se la cree que sea gobernador?, preguntamos nosotros. “Muy fácil su pregunta, amigo, porque tiene cuentas pendientes con la justicia; nomás por eso”. Increíble que la vox populi tenga esas opiniones tan informadas. Pero fue más lejos nuestro amigo taxista: “También está dejando que aumente la delincuencia porque tiene muchos compromisos, con sus recomendados como el secretario de Seguridad Pública Municipal, Héctor Benítez López, que no quería que lo renunciaran”… Ese y muchos otros escenarios semejantes explican porque casi nadie se enteró que hubo un informe de gobierno y que quienes se enteraron pusieron el grito en el cielo, como el Partido Revolucionario Institucional, que en conferencia de prensa su presidente Enrique Juárez Ramírez, descalificó completamente los primeros 10 meses del nuevo gobierno estatal… La gente del pueblo sabe muy bien que “lo que mal empieza, mal acaba”, no hay vuelta de hoja: árbol que nace torcido nunca se endereza, y para allá van las esperanzas de un mejor Aguascalientes, que a diciembre del año pasado ofrecía estándares de progreso si no óptimos, sí razonables y llevaderos, todos los cuales han empezado a caer alarmantemente debido al mal gobierno de Martín Orozco Sandoval.
LA COSA ES QUE…
Empiezan a documentarse los casos de corrupción y para muestra basta un botón, además de los muchos que ya se conocen: El Instituto de Salud del Estado de Aguascalientes recibió en el nuevo gobierno estatal un recurso federal, etiquetado para el nuevo Hospital Hidalgo, que desapareció; qué tal.
