- El diablo nos pasa boleta histórica
- Gustavo Vera atacado por los Ultras
- Política agresiva de los gobernantes
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., martes 23 julio 2019.- Seguimos con “La bronca del diablo contra México”, pero esta vez con otras de las travesuras endemoniadas, un poquito como le ocurre al presidente Andrés Manuel López Obrador con los ataques diarios de la ultraderecha que quiere verlo fracasar, algo que la mayoría de los mexicanos no deseamos. En lo que a continuación relataremos se encontrará enorme semejanza de, el papa Francisco le llama algo así como el amor a “cultura del dinero”. Todo empezó en el año de 2015 cuando el Pontífice inició su personal discernimiento sobre México, luego de aquel Pentecostés en que exorcizara al michoacano Ángel en plena Plaza de San Pedro… En Buenos Aires hay un personaje amigo del pueblo, Gustavo Vera, con casi cuatro décadas de activismo en favor de los pobres, al que Su Santidad le ha ganado la voluntad. Se saludan cada bimestre en el Vaticano. Cuando Vera era legislador, el Papa Francisco le pidió que en la lucha contra el narcotráfico nunca permitiera que Argentina se mexicanizara… También en Argentina hay a quienes les molesta que se ayude a los pobres, por eso atacan a Gustavo Vera, acusándolo de pederasta. Una periodista le entrevistó el 15 de abril de 2018: “Pero hay gente (Natacha Jaitt) que no lo quiere nada a usted, ¿por qué?”, le espetó la conductora. “Porque probablemente hay gente que hace culto del dinero como parte de su vida. Yo me hice amigo de Bergoglio y creo que él, de alguna manera, lo que más estima de La Alameda (una fundación altruista) es que muchas cosas las hacemos totalmente a pulmón”, señaló… Seguimos con José Manuel Vidal, el periodista y teólogo español, que entrevistó al padre José Antonio Fortea, el 23 de junio de 2015: “¿No necesita también ser exorcizada España, al menos tanto como México?” Fortea no es muy preciso en sus respuestas, como si no supiéramos que antes de México, jamás en los últimos 2,300 años hubo un magno exorcismo a una nación; lo que exorcizó San Francisco de Asís en el Siglo XVI fue a una ciudad. Diría Fortea: “Un exorcismo sobre toda una nación se puede hacer en cualquier país del mundo y en cualquier momento de la Historia. Toda nación tiene demonios en ella que tientan a los hijos de Dios”. ¿Cuál es la principal tentación con la que el diablo tienta a nuestro país? Vidal se refiere a España. Responde el verdugo del demonio: “En mi modesta opinión, opinión totalmente personal, el mayor peligro por el que debemos orar mucho es para evitar que el Estado, dentro de cinco o siete años, declare que las catedrales son bienes nacionales y que su dueño es la Nación. Nos encaminamos decididamente a una política totalmente agresiva de los gobernantes y sus futuras leyes contra la Santa Iglesia de Dios” … La primera vez que el Papa Francisco habló de “La bronca del diablo contra México” fue en 2015. Ante la corresponsal de Televisa en el Vaticano, Valentina Alazraki, con quien el Santo Padre recordó que “México pasó momentos de persecución religiosa, donde engendró mártires”. Hizo una relación entre el odio del diablo a México y la profunda devoción de los mexicanos a la Virgen de Guadalupe. “Yo pienso que a México el diablo lo castiga con mucha bronca. Por esto. Creo que el diablo no le perdona a México que Ella haya mostrado ahí a su Hijo”. Precisó que “esta es una interpretación mía… México es privilegiado en el martirio, por haber reconocido, defendido, su Madre. Usted va a encontrar a mexicanos católicos, no católicos, ateos, pero todos guadalupanos… O sea, lo de la santidad también está unido ahí. Yo creo que el diablo le pasó la boleta histórica a México ¿no? Y por eso todas estas cosas. Usted ve que en la historia siempre ha aparecido focos de conflicto grave ¿no?”, diría el Papa Francisco.
LA COSA ES QUE…
El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, repitió la logística del 18 de enero pasado, cuando el incendio de la toma clandestina de Tlalhuelilpan, donde puso a trabajar a su gabinete de seguridad durante 72 horas casi ininterrumpidas, ese fue su éxito. Hizo lo mismo esta vez en la Huasteca Hidalguense ante la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador. Un político de oficio, pues; qué tal.