Carlos Urzúa Macías
- La renuncia de Carlos Urzúa
- Despiertan al “tigre dormido”
- 4ª Transformación abollada
Javier Rodríguez Lozano
CIUDAD DE MÉXICO, miércoles 10 julio 2019.- La cotización del peso frente al dólar amaneció ayer a 19.20. Veremos qué nos dice hoy ese mismo indicador, que como todos los instrumentos de los mercados financieros, no tienen amigos, sino intereses. Es decir, una décima porcentual de diferencia nos dirá con precisión irreprochable si la renuncia de Carlos Urzúa Macías a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público fue correcta; y aun más, si el nombramiento del nuevo secretario Arturo Herrera, también es el correcto. Por lo pronto, al cierre de este texto, la cotización del peso frente al dólar ya era de 19.45. O sea, en su primer escenario los mercados financieros desaprobaban esos acontecimientos con 25 centavos de “castigo” al peso mexicano. Y si le echamos más números a esta cuestión encontraremos que eso significa más pobreza… “El país está muy bien, estamos con mucha tranquilidad”, diría el nuevo secretario de Hacienda, Arturo Herrera, en una de sus primeras declaraciones a la prensa, sin embargo, la realidad es otra… En dos ocasiones, Arturo Herrera ha sustituido a su jefe Carlos Urzúa Macías, una como secretario de Finanzas del Gobierno de la Ciudad de México con Andrés Manuel López Obrador y la de ayer. Urzúa, con una academia económica y financiera infinitamente superior a la de su sucesor, había sido el primero de los funcionarios de la Cuarta Transformación que al iniciar su función el pasado 1 de diciembre, ya tenía lista su carta de renuncia, como si ésta fuera una de las ecuaciones inevitables de las ciencias macroeconómicas globales… “Él no está conforme con las decisiones que estamos tomando y nosotros tenemos el compromiso de cambiar la política económica que se ha venido haciendo desde hace 36 años”, diría el presidente Andrés Manuel López Obrador al nombrar a Arturo Herrera como nuevo secretario de Hacienda… Alberto Gómez Alcalá, director de Estudios Económicos de Citibanamex, le dio la bienvenida a Herrera y reconoció sus desempeños como secretario de Finanzas del gobierno capitalino y subsecretario de Hacienda, opinión que no compartió el panista Sindicato Patronal, cuyo presidente, Gustavo de Hoyos, le dijo a López Obrador que la renuncia de Carlos Urzúa preocupa porque “reveló que la administración actual adopta políticas sin método, sin bases, ni información que las justifiquen, así como con visiones extremistas de gestión pública”. Recibió el nombramiento de Arturo Herrera con “la esperanza en la preservación de la ortodoxia”. Es decir, en que no empeore la política económica y financiera… Este acontecimiento resucita al “tigre dormido” de la oposición, que ya tiene “tela de dónde cortar”. No tenía materia y estaba en la modorra, lo mismo el priismo, que el panismo y el…, bueno, lo demás ni existe. Muy pronto en el sexenio para la enorme sacudida que provocará al gobierno de Andrés Manuel López Obrador la renuncia de Carlos Urzúa. Dos eran, son y serán siempre, al menos para las próximas décadas, las prioridades gubernamentales: combatir la pobreza, a través de una política económica del tipo de los regímenes estabilizadores de los Adolfos López Mateos y Ruiz Cortines, y Gustavo Díaz Ordaz, más pragmáticas que utópica como la actual, y resolver la inseguridad, como ya se perfila desde el pasado 1 de julio, con la puesta en marcha de la Guardia Nacional, en la que hay un elemento por cada 10 o 20 de la delincuencia organizada… Va a ser interesante la evolución de la política hacendaria de austeridad, representada más por la oficial mayor Rocío Buenrostro, que limitaba hasta al propio secretario de Hacienda. Arturo Herrera la responsabilizó del desbarajuste por los medicamentos, a ver qué dice ahora el secretario en ese mismo tema.
LA COSA ES QUE…
Pero lo grave no será eso, sino ver si tanto Alfonso Romo como Rocío Nahle –que quiere ser gobernadora de Zacatecas- sobreviven en el gabinete, luego de que se confirmen las claras advertencias de Carlos Urzúa Macías, en el sentido de que sus injerencias en política económica y financiera –como en los proyectos en Pemex- harán un enorme daño a los sueños reivindicadores de la Cuarta Transformación; qué tal.