El padre Gabriel Amorth, el más grande exorcista del Vaticano
- Enfrenta el Papa a los demonios
- Fracasan exorcistas mexicanos
- La Guadalupana en la Conquista
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., miércoles 3 julio 2019.- Ayer decíamos que el Papa Francisco, al exorcizar en mayo de 2013 al michoacano Ángel -que llevara al Vaticano el padre Juan Rivas, instruido por el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, desesperanzado por el fracaso de una treintena de exorcismos de prelados mexicanos durante los últimos 14 años- se escuchó estruendoso rugido, presuntamente emanado de los demonios al salir del cuerpo del infortunado, desfallecido e inerte en una silla de ruedas. Además del padre Gabriel Amorth, que como ya dijimos, en 26 años practicaría más 150 mil exorcismos y expulsaría a infinidad de demonios, estuvo de acuerdo en que el video de la televisión vaticana que captara fielmente el exorcismo del Sumo Pontífice y que le diera la vuelta al mundo, ahí también estaba el famoso demonólogo español José Antonio Fortea, quien semanas después ofrecería a la prensa de su país su versión de los hechos, con un agregado especial: la historia del primer macroexocismo de la Iglesia Católica realizado en los últimos dos mil años en una ciudad mexicana, San Luis Potosí, donde el Papa Francisco mostró su escrúpulo por las ortodoxias cristianas, al ser precisamente San Luis, la región francesa donde se halla la ciudad de Adrezzo, donde San Francisco de Asís practicó el primer exorcismo a una ciudad, dominada por el demonio a través de la terrible violencia principalmente entre las familias, en el Siglo XII… ¿Qué sabía el Papa Francisco, de aquel “incontestable caso de posesión diabólica” a la mexicana con Ángel el michoacano? En aquellos momentos de mayo de 2013, prácticamente nada. Sería el padre Amorth quien, con la información del padre Rivas y del propio Sandoval Íñiguez, después de lo ocurrido en el Pentecostés de 2013, investigaría y reportaría a Su Santidad que la causa de las posesiones demoniacas de Ángel el michoacano, tenían su origen en la legalización del aborto en la Ciudad de México, aprobado por la Asamblea de Representantes en abril de 2007, más o menos cuando el presidente Felipe Calderón, declara la guerra al crimen organizado, el 11 de diciembre de 2006, y el primer operativo de su inconcluso Mando Único tiene una impresionante coincidencia: fue en Michoacán, que en aquel año había sido masacrado por 500 asesinatos de los cárteles de la droga. Es decir, lo dijimos al iniciar esta serie, las hojas sueltas no nos dicen nada; pero juntadas, organizadas y editadas, dicen muchas COSAS… DE PRENSA. Los tres ejes de la guerra al crimen organizado del presidente, michoacano y panista, Felipe Calderón Hinojosa, fueron: Enfrentar y llevar la justicia a los criminales; depurar y fortalecer los cuerpos policiacos, ministeriales y judiciales; y reconstruir el tejido social a través de la generación de oportunidades sociales y el trabajo para la gente. Inútil subrayar el enorme fracaso de aquella estrategia de un presidente ingenuo e improvisado. A aquellos días, Ángel el michoacano ya llevaba casi ocho años poseído por los demonios, que después otras entidades oscuras también lo agarrarían de “hotel”, contra cuya legión nada pudo hacer la Iglesia Católica mexicana… Después de Ángel, el Papa reunió más información, hasta llegar a la entrada de los conquistadores al mando de Hernán Cortés a la Gran Tenochtitlan y encontrar en las pirámides de la Plaza Mayor los cráneos de cientos de miles de aztecas sacrificados. Fue ahí donde el conquistador presentó a la Virgen de Guadalupe de Extremadura, igual que lo hiciera Cristóbal Colón en 1492 al llegar a América… Volvamos a abril de 2007 cuando la capital de la República Mexicana legalizara el aborto, al reformarse el artículo 144 del Código Penal con 46 votos a favor por 19 en contra y una abstención. Nadie imaginó que aquella reforma le abriría las puertas de la Ciudad de México al demonio, donde desde entonces, por cada aborto hay también un asesinato del crimen organizado en todo el país. México y Cuba eran entonces en Latinoamérica los únicos países con el aborto legalizado, igual que en Estados Unidos. En el sexenio de Calderón hubo más de 121 mil muertos por el crimen organizado, el doble que con Vicente Fox.
LA COSA ES QUE…
¿Qué fue lo que le dijo el padre Juan Rivas al Papa Francisco, al presentarle al michoacano Ángel? Algo que llamó poderosamente la atención al heredero de las Sandalias de Pedro. Lo platicamos mañana; qué tal.
