-
Cómo fue
-
¿Quién mueve los hilos de la violencia?
-
Callar, solo para proteger a los inocentes
-
Presidentes que crearon su propia violencia
Javier Rodríguez Lozano
CIUDAD DE MÉXICO, lunes 17 julio 2023.- Cuarenta años después, analizar un caso policiaco que convulsionara al país resulta una espectacular experiencia personal, porque algunos puntos oscuros de pronto se esclarecen como por arte se magia; por ejemplo, entender ahora que atrás de los cambios políticos en México y el mundo siempre estará la violencia. ¿Y quiénes mueven sus hilos? El poder económico global.
Desde 1966 en que nos iniciamos en el oficio de informar aprendimos que, aunque la realidad fuera para nuestros ojos, inobjetable e indefendible, existían criterios editoriales en los medios de comunicación que simplemente convertían en humo aquella realidad; aprendimos que no todo lo que decimos los medios es verdad, que siempre hay algo mucho más, pero oculto, muy oculto.
Y del mismo modo, como está ocurriendo ahora en México, inmerso en un proceso de Sucesión Presidencial, la violencia se erige no solo como un “gran elector”, sino en el motor de los escenarios que veremos en la vida pública de aquí y hasta el mes de julio de 2024, en que las urnas reciban el voto de los mexicanos y determinen su destino… Un destino, por otro lado, también, ya cantado.
Pero nuestro tema es el robachicos más sanguinario de finales del siglo pasado: La Hiena de Sinaloa que, de acuerdo a Bernardo, un menor de edad, sobrino suyo y miembro de la banda criminal, había secuestrado y asesinado a 53 niñas como Margarita Ramírez García y niños como Miguel Ángel Arizmendi Flores, en aquellos días finales de 1982, como en estos momentos, a un año del cambio de gobierno.
Vayamos a los datos duros, incluso, alguno de los cuales no fueran publicados en aquellos días: La Hiena de Sinaloa, Aureliano Rivera Yarahúan, exjefe de Investigaciones Políticas de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa, tenía algunos subalternos operando en la Ciudad de México… ¿Operando qué? Nunca se dijo, pero sus nombres sí serían difundidos y algunos de ellos, detenidos solo para ser presentados a la prensa como blancas palomitas, deslindadas de los crímenes de su ¿exjefe o jefe, Rivera Yarahuán?
En estos momentos (primeros días de julio de 2023) la Hemeroteca Nacional de la UNAM se halla de vacaciones, pero ahí, entre las páginas de los periódicos, seguramente podremos encontrar otro dato súper duro: Que El periódico que dice lo que otros callan, La Prensa, sería el único medio de comunicación invitado al domicilio particular del ingeniero Carlos Arizmendi Aguilar y su señora esposa, María de los Ángeles Flores, en Luz Saviñón 401 en la Del Valle, para informar del secuestro de su hijo Miguel Ángel, ocurrido unos 10 días atrás.
Aquella noticia la publicaría el reportero Augusto Cabrera Mondragón en La Prensa, el martes 28 de diciembre de 1982…
El jueves 30 siguiente, este servidor publica en el mismo periódico la noticia del asesinato del niño Miguel Ángel Arizmendi Flores… A 48 horas de la denuncia pública del padre de la víctima.
Pero no solo fue en estos primeros escenarios en que La Prensa era el único periódico que publicaba la mejor información del caso, sino que también durante los siguientes días, hasta la culminación del mismo, el sábado 8 de enero de 1983 cuando las autoridades informaban de “La caída de los monstruos”, y la muerte a balazos de La Hiena de Sinaloa, Aureliano Rivera Yarahuán.
Se sabe, que no existe en el sistema jurídico mexicano, forma en que un juez obtenga de un periodista la descripción de sus fuentes de información, pero éstas suelen ser siempre oficiales, ocultas en la extra oficialidad, como en el caso de aquella “Garganta profunda” (se sospecha que era Henry Kissinger) que filtrara toda la información a los reporteros de The Washington Post, Carl Bernstein y Bob Woordward, quienes destaparan el Watergate que llevaría a la dimisión al presidente Richard Nixon, al demostrarse su espionaje.
Este es un ejemplo clásico de cómo el poder económico global mueve los hilos de los sistemas políticos de todos los países del mundo, porque aún hoy en día, Kissinger, de 100 años de edad, es su representante más genuino.
Yo -Javier Rodríguez Lozano- siempre recibía con puntualidad y absoluta certeza, los avances de las investigaciones policiacas en torno a La Hiena de Sinaloa; hubo ocasiones que me vi obligado a no publicar nada, para no poner en riesgo la vida de personas, como cuando se iba a pagar el rescate de Margarita Ramírez García, que no se pagó porque hubo una balacera con resultado que no llegó a los medios de comunicación, pero en ella se detendría precisamente a Bernardo, que resultaría la punta del hilo con el que se desenmadejaría aquella trama criminal.
La policía urdió un enfrentamiento, pero observaciones periciales de los hechos y de los cadáveres, hablaron de ajusticiamientos.
En los días siguientes, el presidente Miguel de la Madrid presumiría el primer triunfo de su administración, y no precisamente económico, como se esperaba, sino policiaco; y anunciaría la desaparición de una corporación policiaca que venía desde los tiempos de Porfirio Díaz, inicialmente llamada la Reservada y luego la DIPD, la División de Investigaciones para la Prevención y la Delincuencia, cuyo último comandante fuera Reynaldo López Malváez.
La Sucesión Presidencial, un tema también a mi cargo que había publicado profusamente el periódico La Prensa, un año antes de La Hiena de Sinaloa, había revelado la encarnizada contienda política entre dos personajes: Miguel de la Madrid y Javier García Paniagua.
En los hechos circunstanciales de aquella época, la necesidad económica de la población era más apremiante que la de seguridad, sin embargo, el mundo se movía en la primera dirección… Y había que distraerlo.
Si analizamos la agenda de trabajo de aquellos años, de 1982 y 1983, del Club Bilderberg, que integra a las y los 130 personajes más ricos del mundo, que anualmente se reúnen desde 1954 para decidir adónde de ir la humanidad, veríamos esos énfasis en el tema económico.
Recuérdese también que en 1971 Richard Nixon, retiraría el soporte del patrón oro al dólar, que le fuera otorgado por Gran Bretaña y el orbe en 1945 para convertir a la moneda estadunidense como la referencia mundial, desde cuando entraría en la crisis en que hoy, en 2023, le ha quitado ese poder y hasta el peso mexicano se le está subiendo a las barbas.
LA COSA ES QUE…
Por último, solo me resta decir que a Miguel de la Madrid le correspondía introducir a México, precisamente, a aquellos primeros escenarios del neoliberalismo que perseguía el poder económico mundial, en el que México ha sido inmisericordemente saqueado, y cuyo alumno principal entraría pronto en escena: Carlos Salinas de Gortari.
Con esto demostramos que atrás de la violencia siempre estará el poder económico global; siempre.
Qué tal.