-
¿Cómo decirles que l@s engañan?
-
Mentira que contamina al planeta
-
Mitos y tragedias en la alta traición
-
Creías que toda había terminado…
Javier Rodríguez Lozano
CIUDAD DE MÉXICO, martes 2 mayo 2023.- Hace poco más de seis meses que fuimos llamados a discernir con profundidad si debemos escribirlo o no, una Voz Superior (creemos) nos urge a que lo hagamos, pero nos detiene nuestro escéptico código de ética periodística.
Sin embargo, los hechos están ahí y como toda actividad humana, impactan y contaminan al Universo, de una manera escandalosa e infinitamente peor que el cambio climático, porque nos convierte en el más raro de los mundos del mosaico cósmico.
Nos somos los primeros, ni seremos los últimos en argumentar que “voces misteriosas”, nos han dado un conocimiento que nunca imaginamos poseer, aunque desde niños algunas de sus precocidades nos hayan distinguido de los demás, pero al llegar a la tercera edad y con ella a la noche más oscura del alma, cuando le perdimos el sentido a la vida y creíamos que todo había terminado, recibimos un ultimátum: “O lo escribes, o lo escribes, no hay de otra”.
Llevo largos años recibiendo el mismo mensaje y nunca le hice caso: “Recibirás cada vez peores experiencias, hasta que entiendas; o cambias el camino, o la vida te obligará bruscamente a cambiarlo” … Y así fue.
Brian Wiess, Diego Leverone, Joe Dispenza, Cony Méndez, Emilio Carrillo, Michael Hontelé, Roberto Martínez, Jacobo Grinberg, Joselyn Arellano, Florence Scovel Shinn, Martín Rivera y muchos otros contemporáneos Mercurios (mensajeros de Dios) saben muy bien de qué hablamos y ellos nos enseñan cómo hacerlo.
Y nos pide el Universo que hablemos de la infidelidad, de sus mitos y tragedias, y para ilustrarla, para fundamentarla, para hacerla creíble e indudable, nos preparó durante muchas décadas, paso a paso, pacientemente nos fue tallando y forjando y formando, troquelados, cepillados y cincelados si fuera el caso, casi casi, como a piezas de la relojería suiza para ser exactos y no especulativos.
Son muchos años de oficio periodístico, 57, y nunca, ninguno de nuestros casos sería impugnado en algún alto tribunal, en cambio, sí llevamos al escrutinio del sistema jurídico mexicano infinidad de asuntos que lastimaron al pueblo de México, todos ellos están documentados en las hemerotecas de los periódicos La Prensa, El Universal y Excélsior, entre los años de 1976 y 2006.
Con este perfil periodístico y moral hoy, y en el futuro inmediato, hablaremos de los mitos y las tragedias de la infidelidad, desde un punto de vista estrictamente espiritual, porque el terrenal todavía no está en condiciones de entenderlo.
Sin embargo, lo dirigimos a él, al ser humano de la tercera dimensión, porque esta conducta está bajo control en la 5ª Dimensión, de unos 800 millones de personas, de los ocho mil millones que el 15 de noviembre de 2022 registró la ONU como pobladores del planeta, y aquel porcentaje es de acuerdo a datos del espiritualismo, que viene documentando esta transición desde 2009 a nuestros días.
Al menos -nosotros creemos que son muchísimos más, porque no existen en el mundo estadísticas confiables al respecto- siete mujeres y siete hombres en una relación sentimental (matrimonial, conyugal, amor libre, amigos con derechos o simplemente cuates íntimos) son engañados por sus parejas, porque simplemente “nadie es dueño de nadie”, o por el bíblico y amenazante “ojo por ojo y diente por diente”, es decir, la venganza del milenario adn de cientos y miles de vidas en cada uno de nosotros.
El problema no es eso, la infidelidad, o deslealtad, o traición en sí, porque tanto hombres como mujeres “creen” que eso está bien, que ser infieles les da status de conquistadores y de que aun a avanzada edad no se acaba la belleza femenina; no, eso no es el problema:
– El problema es que esa conducta humana de hombres y mujeres por igual, genera las peores tragedias que haya conocido la historia humana, porque su pobre vibración espiritual, en tanto energía exactamente igual a la de que está hecho el Universo, y el dinero incluso, contamina al planeta, infinitamente peor que en los más terroríficos escenarios del cambio climático; una gran letrina o la página más oscura del Apocalipsis son una caricatura.
Un poco como a los ya citados Weiss, Leverone, Dispenza y muchos otros mensajeros del Universo, en sueños, y en meditaciones y visualizaciones principalmente, hemos sido informados del por qué y para qué cada una de las 16 piezas negras y 16 blancas del tablero de ajedrez (torres, alfiles, caballos, rey y reina y peones), se habían movido entre los 32 escaques libres, igual que en las reuniones donde se llevan a cabo los Pactos de Almas antes de encarnar, y como por arte de magia pasamos de una vida sin sentido, a encontrarle el verdadero sentido a la vida, quizás como sugiere Víctor L. Frankl, padre de la cuarta escuela austriaca de la sicología.
El jaque mate fue demoledor, luego de muchos juegos en los que casi siempre las blancas creían dominar, hasta que las negras aparecieron con todo el poder que les da la oscuridad, que también es hija del mismo padre, como ha relatado Paulo Coelho en las cotidianas batallas de los príncipes, y estallaron en la más oscura noche del alma.
Y fue entonces que entendimos los mitos y las tragedias de la infidelidad…
“Pero oye, ese conocimiento no es para ti solo, debes compartirlo con quien lo necesite también. Debes decirle a la gente que se halla en una relación sentimental que cada vez son más mujeres que hombres las que traicionan el compromiso; y que ese compromiso está despareciendo paulatinamente en todas las sociedades del mundo post pandémico, donde precisamente, la catarsis de la relación humana tocó techo, que en la nueva relación sentimental ya no tendrá ningún sentido la infidelidad; debes decirles por qué”, me hizo saber la voz de mi conciencia y ahí fue donde, como dicen en mi barrio, “la marrana torció el rabo”.
LA COSA ES QUE…
Y obvio, ya con la experiencia de que, si no haces lo que el Universo te pide, te traerá peores experiencias hasta que aprendas la lección, porque en estos últimos años y meses hemos perdido más de lo imaginado, y si no escribimos sobre la infidelidad ya podríamos acabar perdiéndonos también en la noche de los tiempos, después de una vida inútil; y no, eso no es lo nuestro, así que hablemos de la infidelidad, de sus mitos y sus tragedias, pésele a quien le pese, que sobrarán, porque es mucho tema para mentes tan cortas.
Iniciaremos con lo que la multidisciplina humana, académica, científica, seria y responsable, dice en estos momentos de la infidelidad en México y en el mundo, por ejemplo, después de Brasil y Colombia, en nuestro país hay la mayor infidelidad de América Latina; le siguen Argentina y Chile, lo que hace a la música de Lola Beltrán más dramática que la de Carlos Gardel.
Y cómo el feminismo azuzado por el poder económico mundial y la pandemia, invirtieron los papeles y ahora hay más infidelidad femenina que masculina, que impactan sensiblemente en el contrato matrimonial, que cada vez más pierde su razón de ser.
La relación sentimental del mundo hoy es otra cosa y hay que platicarla con responsabilidad, o dejarla fluir, como lo hacen las y los jóvenes, sin ningún tipo de reglas previas.
“Llegará un momento en que creas que todo ha terminado, ese será el principio”: Epicuro.
Lo que antes avergonzaba al hombre de bien hoy es imperio de la mujer, pero el karma que se crea es inevitable, en ella y en el planeta, tal como fue desde un principio, en el amanecer de los tiempos,
Qué tal.