Presidente de la República entrega Premios Nacionales de Arquitectura e Ingeniería 2020
Distingue al arquitecto Gabriel Chávez de la Mora y al ingeniero Francisco José Garaicochea y Petrirena por trayectoria profesional y excelencia en el ejercicio de sus profesiones
CIUDAD DE MÉXICO, viernes 10 diciembre 2021.- Al exaltar y agradecer sus aportaciones al desarrollo del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador distinguió con el Premio Nacional de Arquitectura 2020 a Gabriel Chávez de la Mora y con el Premio Nacional de Ingeniería 2020 a Francisco José Garaicochea y Petrirena.
“Es importante destacar que en todas las obras que está realizando el gobierno están trabajando ingenieros de nuestro país y empresas mexicanas; son las que tienen los contratos de obra más importantes que ha otorgado el gobierno.”
El primer mandatario hizo un reconocimiento a la labor de Francisco Garaicochea por ser una eminencia como ingeniero petrolero y coincidió en que la inyección —hasta la fecha—de nitrógeno en Cantarell, condujo a la explotación irracional y desperdicio del campo petrolero que era de los más importantes del mundo, por lo que deben cuidarse los recursos energéticos.
“Decirle al ingeniero Garaicochea que le vamos a seguir haciendo caso en todo, como buenos alumnos, porque él es un maestro, es un sabio y además es un defensor de ese recurso natural que es el petróleo, propiedad de la nación, propiedad de todos los mexicanos.”
En este ámbito, señaló que la nueva política federal pretende procesar en el país todos los combustibles y lograr la autosuficiencia, por lo que avanza la rehabilitación de seis refinerías, se construye la de Dos Bocas y están reiniciando los trabajos de la coquizadora de Tula, además de que se cuenta con la refinería de Texas.
“Con el ingenio y el trabajo, el compromiso en favor de México de los obreros y de los técnicos mexicanos, salió adelante la industria petrolera y creció de manera extraordinaria”
Expuso que el gobierno federal trabaja en todos los frentes de la ingeniería como la construcción de puertos, presas, aeropuertos o la rehabilitación de hidroeléctricas, y subrayó que es un timbre de orgullo que este sexenio concluya en 2024 con mil km de vías férreas para trenes modernos a lo largo del país.
Agradeció a Gabriel Chávez de la Mora por su contribución a la arquitectura y recordó que Palacio Nacional es una joya que inició su construcción hace 500 años y hoy es patrimonio del pueblo. Además, destacó que el gobierno federal está comprometido con la conservación del patrimonio histórico, cultural y arquitectónico del país.
Detalló que está en marcha el programa para conservar sitios arqueológicos de la época prehispánica, así como la conservación de edificios y templos coloniales, especialmente acciones de reconstrucción a causa de daños ocasionados por los sismos.
Agregó que también se realizan obras de intervención en espacios urbanos —que han sido premiadas—, donde trabajan cientos de arquitectos en colonias populares de 100 municipios mexicanos.
Premio Nacional de Arquitectura 2020
Al recibir el Premio Nacional de Arquitectura 2020, Gabriel Chávez de la Mora agradeció al presidente López Obrador y expresó:
“Lo recibo como un estímulo para continuar con entusiasmo este servicio profesional de la arquitectura, que es mi ministerio y diaconía como religioso benedictino y presbítero.”
Expuso que su desempeño profesional se ha desarrollado principalmente en el género religioso, arquitectura de iglesias y arte sacro, artes y artesanías que integran a la arquitectura religiosa y litúrgica en propuestas contemporáneas.
Solicitó al presidente que se robustezcan los presupuestos para las entidades dedicadas a proteger, restaurar y construir o dar mantenimiento a los edificios de nuestro patrimonio cultural que han sido afectados por el tiempo, los años, el clima o la naturaleza.
Al detallar la trayectoria del arquitecto Gabriel Chávez de la Mora, el presidente de la Academia Nacional de Arquitectura, José Francisco Reygadas Valdez, detalló que el Premio Nacional de Arquitectura 2020 es el primer egresado de la Universidad de Guadalajara y fundador de su Escuela de Arquitectura.
Ha sido candidato dos veces al Premio Nacional de Ciencias y Artes en la rama de las bellas artes.
“Hoy, a los 92 años de edad, es un testimonio vivo y activo de la entrega de un hombre a su oficio, dedicado por decisión propia —en su congregación— a la construcción de espacios de reconocida habitabilidad; pero sobre todo, con grandes aportaciones artísticas, culturales y sociales, no sólo en edificaciones religiosas, pues ha construido escuelas y recintos culturales para la educación, atendiendo comunidades de niños y jóvenes de escasos recursos y además se ha desempeñado como un reconocido artista en el campo de la pintura, la escultura y el grabado.”
Añadió que en sus obras destacan el profundo compromiso con la austeridad y el minimalismo, y que los méritos de Chávez de la Mora son reconocidos por su testimonio en piedra, madera o cristales multicolores, que puede ser considerado patrimonio artístico y cultural de los siglos XX y XXI en nuestro país.
Premio Nacional de Ingeniería 2020
Al recibir el Premio Nacional de Ingeniería 2020, Francisco José Garaicochea y Petrirena se sumó a la propuesta del ingeniero Eduardo Barrueta Centeno en torno a la construcción de plantas criogénicas para aprovechar el condensado que se produce en los principales yacimientos del litoral de Tabasco. Asimismo, recomendó aprovechar al máximo el gas y el condensado de los yacimientos que poseemos en dicho litoral.
Luego de agradecer al presidente y reconocer a colegas que fallecieron sin haber recibido el reconocimiento en vida, y compartir la distinción del PNI 2020 con el grupo Ingenieros Pemex Constitución del 17, planteó que hasta el momento no ha sido remediada la inyección de nitrógeno en Cantarell:
“Se sigue inyectando, comprando nitrógeno y quemando a la atmósfera gas natural con un alto contenido de condesados.”
Al detallar la trayectoria de Garaicochea y Petrirena, el Premio Nacional de Ingeniería 2008, Javier Jiménez Espriú, destacó que Francisco Garaicochea y Petrirena ha ejercido su profesión con excelencia, tenacidad y ética, dedicando su vida a la industria petrolera desde Petróleos Mexicanos (Pemex).
“Ha tenido siempre presente —y por ello su pasión en su empeño—, en que su labor no se limitaba a colaborar para explotar y producir los energéticos y que Pemex no es sólo una empresa productora de insumos energéticos y petroquímicos, sino, además —y fundamentalmente— la empresa símbolo de la soberanía y de la identidad nacionales.”
Jiménez Espriú agradeció al presidente López Obrador por la entrega del premio en Palacio Nacional y expresó:
“Quienes hemos luchado, seguimos y seguiremos luchando por la soberanía y el patrimonio energético de México, estamos obligados hoy más que nunca a emular a nuestro homenajeado.”
Premios Nacionales de Arquitectura e Ingeniería 2020
El presidente de la Asociación de Ingenieros y Arquitectos de México (AIAM), Ricardo Rodríguez Romero, destacó que estos premios nacionales son otorgados por los propios profesionistas del ramo en el país para reconocer la trayectoria profesional y la excelencia en el ejercicio de la arquitectura y la ingeniería.
Destacó que, por primera vez en su historia, el premio se entrega a un ingeniero petrolero formado en la UNAM y a un fraile benedictino.
Expresó que la AIAM comparte el pensamiento del presidente López Obrador sobre el combate a la corrupción que permeó en todos los estratos sociales y que es un mal arraigado que se debe seguir combatiendo.
“Pugnamos por la transparencia y lo invitamos a reflexionar sobre el acuerdo publicado recientemente, que declara diversas obras públicas como de seguridad nacional. Con voluntad política, las obras deberán ser de la mejor calidad, al menor costo y dentro del tiempo proyectado.”
En torno a la emergencia sanitaria, Rodríguez Romero informó que, tras la reflexión aportada por especialistas del ramo en conferencias y espacios de análisis, se encontró que las asignaturas pendientes son la convivencia familiar, la salud y la educación.
“La conclusión: humanicemos a las sociedades. Debemos aprender de la enseñanza que nos está dejando la pandemia. Construyamos la vida social al interior de las comunidades y de los barrios. Hoy es la oportunidad de buscar ese nuevo orden.