El francés Jean Marc Gabastou y el chileno Cristian Morales Fuhrimann, representantes de la OMS en México. (Foto de Seila Montes, tomada de El País
- México, primero en detección del virus
- Primer algoritmo diagnóstico completo
- Ya es líder en la lucha anti coronavirus
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., domingo 22 marzo 2020.- Es más fácil ver “la paja en el ojo ajeno, que la viga en el propio”. Sin mucho ruido, en silencio y bajo la crítica mordaz de las inquisitorias “cofradías de la leña verde”, México aparece en el mapa mundial del coronavirus como “un país ejemplar”. Y el botón de muestra es inobjetable: España cerró sus escuelas cuando llevaba más de mil casos (ayer registraba mil 326 muertos); Italia, cuando tenía más de dos mil (ayer eran 4,825 decesos), y México con solo 100 casos y dos decesos… La reportera del periódico El País, de España, Carmen Morán Breña, intentó en tres ocasiones obtener de la Organización Mundial de la Salud (OMS) una condena a México, por -como lo publicara el pasado 16 de marzo-, “aplicar la filosofía de la calma en el convencimiento de que si se toman medidas antes de tiempo pueden desgastar a la población para cuando sea más importante que la aplique, pero no es esa la experiencia que tienen otros países”. Nosotros preguntaríamos: “¿Cuáles países? ¿España? Por favor… Es frustrante para un periodista buscar un comentario negativo donde no hay cómo, como le ocurrió a Carmen Morán Breña al entrevistar a los representantes de la OMS en México, el francés Jean Marc Gabastou y el chileno Cristian Morales Fuhrimann. Dice la lead de la nota: “El mapa que muestra la Organización Mundial de la Salud (OMS) para México es sorprendente. Prácticamente toda América aparece ya en color rojo, signo de una epidemia de coronavirus avanzada, salvo México, que permanece gris, es decir, en una primera fase, con 203 afectados y dos fallecidos”. Morales subrayó que “México está tomando varias de las lecciones aprendidas por otros países, como China, y está aplicando medidas coherentes con las recomendaciones de la OMS; fue el primero en poner a punto una prueba de detección para el coronavirus y eso es premisa básica para disminuir la velocidad de dispersión de la pandemia. Esos esfuerzos nos hacen pensar que se siguen haciendo bien las cosas, los 164 son aún importados [de otros países con la epidemia] y las personas con las que estuvieron en contacto han sido estudiadas, eso nos deja tranquilos. Estando aún en el escenario 1 se están aplicando medidas típicas del 2, cuando ya se da transmisión comunitaria. Eso es ir por adelantado. Pongo este ejemplo: en España cerraron las escuelas cuando llevaban más de 1.000 casos y en Italia mas de 2.000; aquí se han clausurado con 100. Podemos apreciar que hay cosas que se están haciendo correctamente, aunque eso no significa que todo va a salir bien, sabemos que vamos a transitar muy pronto al escenario 2 y que el 3 va a expresarse muy probablemente en las próximas semanas. La incógnita es cómo sucederá. ¿Se dará igual por todo el país, escalonadamente por Estados? Eso es un gran desafío”… Gabastour declaró que se ha establecido tecnología de muy alta calidad y personal muy preparado. La capacidad de reacción fue inmediata, tiene uno de los laboratorios de más calidad en la región y en el mundo, “y fue el primer país en implementar el algoritmo para el diagnóstico completo”. Agregó que tiene capacidad tiene, “es cuestión de organización y reorganización en los servicios ante una situación como esta y es ahí donde vamos a ver cómo responde al escenario 3 en las semanas que vienen”. La reportera preguntó por una contradicción entre lo que dicen ellos y lo que opinan otros países, en Europa y China. La respuesta es clara. Morales: “La OMS es una sola. El llamado del director general a los test es para saber por dónde va la epidemia y su dispersión. Quiénes, cómo y por qué se están infectando. En México se hacen test sin dejar a ningún sospechoso. Y además hay un sistema desplegado, gracias a su capacidad de vigilancia epidemiológica, que se llama centinela y que ocupa el sistema de detección de influenza, al cual se le agrega un algoritmo para testear el coronavirus. Hay más de 400 centros para eso y se va teniendo un panorama de la evolución. Es coherente con la insistencia del director general de la OMS”. Gabastou: “El aislamiento de pacientes que podrían transmitir la enfermedad se ha hecho a cabalidad. Si hacemos un tamizaje masivo, ¿a cuántas personas hay que efectuar la prueba y cuántas veces? Ahí ya estaríamos hablando de costo-efectividad. Un negativo hoy no significa que lo sea dos días después. Es mejor el sistema centinela que, hasta hoy, no ha dado ningún resultado positivo. Eso no garantiza que el país esté exento, hay que estar reactivos”… Pero el Gobierno Federal no ha revelado el número de tests y la reportera plantea si no sería conveniente dar estos datos para la tranquilidad de la población. Morales: “Es legítima la preocupación. La población está en derecho de conocerlo. Corresponde preguntarle a las autoridades nacionales. No veo por qué no se da esa información y si no se da hay un problema”.
Gabastou: “9.000 pruebas para la fase 1 de la epidemia y eventualmente 2 es suficiente. En cuanto entremos en el 2 el número de casos y de contactos aumentará y cada vez que tengan síntomas se van a ejecutar estas pruebas y se va a aplicar el muestreo de la vigilancia centinela, ya se está planificando la elaboración. Ya hay proveedores aquí que fabrican lo necesario para estas pruebas. No vamos a estar faltos de pruebas. Y también se hacen proyecciones para el escenario tres, pero no es que entonces se vayan a multiplicar las pruebas, porque ahí ya no hay valor agregado, serán atendidos en función de su sintomatología leve, severa o critica. Ahí [lo que se precisa] son más insumos de protección. Por las características de la población. Aquí hay más gente joven, sí, pero es el segundo o tercer país en diabetes y obesidad, que son factores de riesgo. Un 50% de los que entren en cuidados intensivos podrían fallecer, por eso es mejor que se prevea un número superior para anticipar derivas e imponderables”… Más adelante, luego de referirse a los jubilados que atienden en los supermercados y que deberían ser protegidos, la reportera preguntó: “Todavía hay quien se pregunta si esto del virus es verdad. ¿Está toda la población informada por igual y de forma suficiente?” Gabastou opinó: “Nunca es suficiente. Una población con información científica incorporará los riesgos a los que se expone y eso [debe hacerse] con mensajes a todas las capas de las sociedad. Hay que intensificar las campañas de información y diversificarlas, eso es una recomendación de la OMS y la OPS que hemos hecho aquí. Hemos organizado un taller de comunicación de riesgo para los voceros y comunicadores de la Secretaría de Salud y trabajamos para traducir y difundir afiches para todas las capas de la sociedad y a las comunidades indígenas, que forman parte de la población de riesgo. Trabajaremos con un canal para elaborar y difundir mensajes masivamente a la comunidad. Nunca es tarde, pero es un esfuerzo que debe hacer el país”…
LA COSA ES QUE…
No pudo la periodista de El País, agarrar en curva a los entrevistados de la OMS y sacarles una declaración condenatoria contra México. Se tuvo que conformar con este epílogo: “Como conclusión, debemos entender que México está siendo un país ejemplar en esta lucha contra el virus?”. La respuesta de Gabastou fue: “Las lecciones llegarán cuando acabe la epidemia. Entonces cada país e institución hará su evaluación de las medidas que fueron favorables y las brechas que habrá que corregir en el futuro”… La comunicadora volvió a preguntar lo mismo, pero de otra manera, al ver que ellos las conocían de antemano: “Al inicio de la crisis, ustedes felicitaron a México. ¿Hoy también?” Morales respondió categórico: “Sí”; qué tal.