- Crimen organizado en elecciones
- En 2018, más de 400 agresiones
- El Chapo fue “mapache” en 1988
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., martes 18 febrero 2020.- Ya empezaron a hacerse efectivas las narcomantas aparecidas la semana pasada. No es casual ni coincidencial, es un ciclo que podía llamársele el de “la violencia electoral”. Expliquémenos. Al terminar el sexenio de Felipe Calderón dejando un país en llamas y sangrante, el crimen organizado evolucionó de los estupefacientes a los comicios, no menos rentables, porque les significaba “colaboración estrecha con autoridades”, como dijera Eduardo Guerrero Gutiérrez, en Nexos, el 1 de junio de 2012, al profetizar: “La posibilidad de nuevos atentados contra candidatos o del apoyo sistemático de grupos criminales a favor de una fuerza política en procesos electorales, que cada vez parece menos remota, implicaría un gran desafío para nuestra estabilidad política. Pero antes de adoptar una posición alarmista o de desestimar la capacidad del crimen organizado para corromper nuestra democracia, es necesario preguntarse qué buscan los criminales cuando intervienen en una elección”. El autor omitió los signos de interrogación, pero eso no debilita la fuerza de la reflexión… El 9 de junio de 2018 Excélsior publicó el Indicador de Violencia Política elaborado por la Consultora Privada Etellekt: Un total de 400 políticos y candidatos habían sido agredidos por el crimen organizado, desde septiembre del año anterior. 112 de ellos fueron asesinados. De estos 28 eran precandidatos y 14 candidatos; los demás fueron alcaldes, exalcaldes, regidores, militantes de partidos, dirigentes, exregidores, diputados, síndicos y exsíndicos. Otros 127 fueron amenazados, 76 de ellos eran candidatos y 16 precandidatos… Por eso fue fácil al periódico Reforma ir al grano en su Templo Mayor del 22 de junio del citado año: “En el cierre del proceso electoral dos focos rojos concentran la atención de las autoridades Guerrero y Michoacán donde el narco ha asentado sus reales La violencia desplegada por el crimen organizado contra candidatos ha hecho de estas elecciones las más sangrientas de las que se tenga memoria Y la situación no se ve que pueda mejorar en los próximos días No en balde la presidenta del Tribunal Electoral Janine Otálora hizo un inusual y desesperado llamado a los gobiernos federal estatales y municipales para que garanticen la seguridad y los derechos de los electores”. La entonces presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación había reconocido ampliamente la injerencia de la delincuencia organizada en las elecciones… Viene 2021. A fin de hacerse indispensable el Instituto Nacional Electoral afirma que el proceso electoral 2020-2021 será “el más grande y complejo de la historia”. Habrá elecciones en las 32 entidades del país, donde elegirán 500 diputados federal y en 15 de las cuales se elegirá gobernador. El padrón nunca antes visto será de 96 millones de electores, seis millones más que hace tres años, y se disputarán tres mil 500 cargo, 260 más que en los últimos comicios. El PRI gobierna en ocho de las 15 gubernaturas en juego, el PAN cuatro y PRD, Morena y un independiente (Nuevo León), una cada uno. Todo ellos son: Aguascalientes, Durango, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Hidalgo, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas. Se elegirán congresos locales en Aguascalientes, Durango, Ciudad de México, Chiapas, México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán. Y alcaldías en: Coahuila, Quintana Roo y Tamaulipas, nada más… ¿Que empieza a pasar en Aguascalientes? Hace unos cinco años, la DE registraba nueve cárteles del crimen organizado operando en el país: Los Zetas, de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, de los Beltrán Leyva, del Golfo; de Juárez; La Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios. En 2020 el liderazgo lo sustenta el CJNG y los más debilitados son La Familia Michoacán y Los Caballeros Templarios. El de El Mencho predomina en: Nayarit, Jalisco, Colima y Aguascalientes, disputa Michoacán, Guanajuato, San Luis Potosí, Veracruz, Chiapas y Veracruz… Todavía están en Aguascalientes, igual que en 2007 cuando El Jueves Negro, La Oficina, asociada con los Beltrán Leyva; y Los Mazatlecos, según el exvocero de Fox y también exguerrillero, Rubén Aguilar Valenzuela. Y la que no está ya es la Familia Michoacana… La “violencia previa a las elecciones seguirá. Desde ahora se les está metiendo miedo a quienes aspiren a un cargo popular para 2021 y tendrán que pensarlo dos veces. El Congreso del Estado será renovado en sus 27 curules, después de una muy gris LXIV Legislatura, que no dejó la mínima huella en el Estado de Derecho aguascalentense; qué tal.
LA COSA ES QUE…
El Universal hace apología del crimen organizado al describir una película de narcos de Netflix, en la que Miguel Ángel Félix Gallardo participara en “la caída del sistema” en la que, con la ayuda de Manuel Bartlett Díaz, entonces secretario de Gobernación, se robara la elección de 1988 a Cuauhtémoc Cárdenas, al poner en marcha con Jorge de la Vega Domínguez, líder del PRI, la clonación del Sistema Nacional de Información Política Electoral (SNIPE), para arrojar otros resultados. Por órdenes del “El jefe de jefes”, aquí el Chapo Guzmán la hizo de “mapache electoral”; qué tal.