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Los mil rostros de la corrupción
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No todo el que tiene es malvado
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“También en San Juan hace aire”
Javier Rodríguez Lozano
AGUASCALIENTES, Ags., martes 14 enero 2020.- Otra de las coincidencias entre el Papa Francisco y Andrés Manuel López Obrador, en su horizonte transformador que privilegia el combate a la pobreza, está también erradicar “la medusa de las mil cabezas y rostros”, como denominamos a la corrupción donde quiera que se manifieste. Cuando el 18 de julio de 2013 en que su Santidad encargara al sacerdote Ángel Vallejo Balda y la consultora Francesca Chaouqui, la formación de la Comisión Referente de Estudio y Guía sobre la Organización de las Estructuras Económico-Administrativas de la Santa Sede (COSEA), nadie imaginó que de sus archivos saldría la información con la que los periodistas Gianluigi Nuzzi y Emiliano Fittipaldi, escandalizarían al mundo católico por segunda ocasión, después de que en 2012 el mayordomo de Benedicto XVI, Paolo Gabrielli, revelara documentos secretos que llevaran a una inédita renuncia papal; tampoco, que luego de 18 años de lucha electoral en la que Andrés Manuel amenazaba con cambiarle a la política mexicana su manera de caminar, nadie lo creyó, a pesar de que en 2018 arrasara en las urnas con esos propósitos inquebrantables… Ayer, en su mañanera, el Presidente López Obrador, dibujó un retrato inédito de la corrupción. Se cuestionó, “¿cuál es la característica del politiquero, o sea, del corrupto durante el periodo neoliberal?”Y lo describió al detalle: Venían de abajo con el esfuerzo de sus familias. Estudiaban, se colaban, entre comillas, agarraban los cargos y a presumir residencias. Si vivían en colonias de clase media, media, media baja, a comprar residencias en Las Lomas de las más grandes, casi una manzana, y aprendían a jugar golf; digo, el golf es un deporte como cualquier otro, pero por las exquisiteces, y luego departamento en Miami y en Nueva York y San Diego, ah, pues claro, San Diego. Así era el modelo. Ya eso no creo yo que vuelva a darse. Y quiero aclarar, no estamos en contra del que, con esfuerzo y trabajo, y de conformidad con la ley, logra un patrimonio. Ese merece respeto, el que invierte, que genera empleos, el empresario. No estamos nosotros en contra de los empresarios, en contra de los comerciantes; no todo el que tiene es malvado, eso debe de quedar muy claro. Esto está más relacionado, no sólo con políticos, también lo aclaro, sino con traficantes de influencia, que se hacían pasar como empresarios y se asociaban, y se dedicaban a robar, a saquear y a darse la gran vida. Era un modelo que se fomentaba, sobre todo de arriba para abajo, pero llegaba abajo. El presidente municipal terminaba y ya no se quedaba a vivir en el municipio, mínimo a la capital y casa nueva, residencia nueva, y rancho y así; y los gobernadores, está a la vista, igual, y hacia arriba lo mismo. No sé si leyeron un reporte sobre bienes del que estaba de seguridad con Calderón, García Luna, un reportaje, no sé si es actual, de esta semana, sobre propiedades, creo que en Miami, pero departamentos… O sea, hay una expresión en el norte, que no la voy a repetir, bueno, bien montados, elegantes, o sea, oficinas, centros exclusivos. Todo eso ya se debe de terminar”… El proceso Vatileaks 2 comenzó el 24 de noviembre de 2015 en Roma. La Fiscalía acusó a Vallejo, Chaouqui y Maio, de filtrar información confidencial de la Santa Sede a los periodistas Nuzzi y Fittipaldi. Se trata de documentos de 2013 y 2014, que daban nueva luz a hechos ya conocidos. El más delicado fue una grabación de una reunión pontificia a puerta cerrada. Incluye correspondencia financiera y admnistrativa vaticana, con la que el Papa creó la COSEA para conocer exactamente las cuentas del Vaticano, que aún hoy en día nadie conoce. Es decir, nadie sabe qué tan rica es la Santa Sede. Revelan que algunos dicasterios ocultaron derroches, resistencias de cardenales, mala gestión inmobiliaria, venta de beatificaciones, agujero en las pensiones y desequilibrio en la distribución de limosnas del “óbolo de San Pedro”, para gastos adminstrativos, entre otras muchas grietas a un colosal edificio de dos mil años de historia.
LA COSA ES QUE…
En otra entrega daremos cuenta de los números, de las cifras de la riqueza del Vaticano, implicadas en esta trama de corrupción, que nos recuerda que “también en San Juan hace aire”; qué tal.
