COSA DE PRENSA / La Pobreza

 

  • La alegría de Andrés Manuel López Obrador

  • Beneficio a 30 de los 35 millones de hogares

  • Pero también a los otros 5 con la economía

  • Inteligencia e ignorancia, sin clase social

 

 

Javier Rodríguez Lozano

 

 

CIUDAD DE MÉXICO, miércoles 4 septiembre 2024.- La pobreza es quizá, la estadística más pobre que haya en México, porque hay muchas fuentes con datos distintos; hace apenas muy pocos años empezaría a tomar en serio, aunque ya desde Humboldt, con la riqueza mexicana en manos del 10% de la población, adelantara un dato que ha sobrevivido siglos.

 

De ningún modo justificamos el VI Informe Presidencial que habla de la salida de la pobreza de 9.5 millones de mexicanos, cuando el último registro oficial que existe, el del Coneval, se refiere a poco más de cinco millones; el dato que nunca estará disponible para ninguna estadística es aquel que solo conoce el Presidente de la República, por ser la persona mejor informada del país.

 

… Y en todos los países del mundo.

 

Ayer, el Mandatario respondió a preguntas de la reportera más incómoda de su sexenio, pero al mismo tiempo también, la mejor de todas las que hayan asistido a La Mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador, Reyna Aidé.

 

¿Por qué la mejor reportera de México?

 

Porque forma parte de los poco más de 20 millones de mexicanos que no creen en AMLO, es decir, una de casi cada siete u ocho personas, que sí creen en su Presidente, en México y el momento histórico que se vive, por el bien de todos; aun de los que no perciban esa grandeza.

 

Reyna Aidé es la mejor periodista porque, aunque sus datos parezcan correctos, no lo son, la hemos visto sobrevivir a las batallas más encarnizadas que puede enfrentar un periodista con el funcionario del más alto nivel. Eso se llama dignidad, un concepto ético que en la comunicación masiva, no cualquiera puede sostener y tampoco a cualquiera le es reconocido.

 

En mi generación, los reporteros sabíamos que pretender tender una trampa con preguntas más que espinosas a un buen político, era arriesgarnos a que éste la aprovechara en su favor y le sacara todo el jugo posible, que es exactamente lo que hace el politólogo Andrés Manuel López Obrador todo el tiempo, por eso deja de hospedarse en Palacio Nacional, sin que ningún periodista haya logrado arrodillarlo, aunque muchos, hombres y mujeres, lo pretendieran con toda su alma.

 

Así ocurrió ayer cuando Reyna Aidé le preguntó por los nombres de los funcionarios encarcelados por corrupción…

 

El Presidente, luego de explicar que mañana jueves la Secretaría de Gobernación y otras dependencias informarían al respecto, se iría al tema presidencial que más le ha conmovido: Su combate a la pobreza. Diría:

 

“Además, además, todavía nos quedan unos días aquí. Y por lo que estoy más contento, bueno, estoy contento por varias cosas, pero yo creo que por lo que estoy más contento, lo dije en el Zócalo, es por haber contribuido junto con muchos, millones de mexicanos, porque lo hicimos entre todos desde abajo, logramos reducir la pobreza y la desigualdad, y eso es un timbre de orgullo, eso no se consigue ni con todo el oro del mundo, la satisfacción, la felicidad que eso produce”.

 

Por supuesto que ayudar a los demás es una satisfacción que no se consigue ni con todo el dinero del mundo; en nuestra labor periodística de 48 años lo hicimos por muchas personas, amenazadas por las más terribles oscuridades y eso nos dio la felicidad que le diera sentido a nuestra vida y que todavía traemos con nosotros, en cada poro de nuestra piel.

 

Regresemos a López Obrador, en otra parte diría:

 

“Calculo… Lo dije, pero también quiero subrayar, somos 35 millones de hogares, 35 millones de familias. Nada más, de esos 35 millones, 30, en 30 millones de hogares llega cuando menos un apoyo, un programa de Bienestar o una pequeña porción del presupuesto. De 35 a 30 millones, de 35 que somos se benefician de manera directa con el presupuesto público, que es dinero del pueblo, 30 millones de familias. Y los cinco que no reciben de manera directa este apoyo también se benefician porque, si hay ingresos abajo, si aumenta el salario, si la gente tiene capacidad para consumir, se beneficia el comercio, se beneficia la industria. Bueno, acabo de decir que los banqueros el año pasado obtuvieron utilidades por 273 mil millones de pesos, utilidades récord”.

 

En otro escenario, a unas horas del Informe Presidencial, el secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), José Nabor Cruz Marcelo, informaría que en 2024, el 36.6% de la población, es decir, 46.8 millones de personas, se encuentran en pobreza.

 

En el Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (EPDS) 2024 se detalla que el 29.3%, o sea 37.7 millones, vive en pobreza moderada y 7.1% (9.1 millones) se encuentran en pobreza extrema.

 

Explicaría que los datos del Informe Presidencial son al 2022, basados en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) del INEGI, cuyos datos más recientes son a ese año.

 

La confusión sobre la investigación de la pobreza, como decíamos, persiste, según se advierte en la opinión de la secretaria de la Facultad de Economía de la UNAM, Daniel Vianey García Pureco:

 

“Es menester reconocer que las personas en situación de pobreza extrema enfrentan condiciones mucho más complejas y severas que requieren intervenciones estatales específicas y diferenciadas. La persistencia de la pobreza extrema sugiere que una estrategia única no es suficiente para atender las diversas realidades de pobreza en México”, comentó en la presentación del evento”.

 

El 24 de mayo pasado la periodista Karina Suárez publicó el reportaje “Evolución de la pobreza en México”, de acuerdo al cual durante el sexenio de AMLO cinco millones de mexicanos salieron de la pobreza:

 

“México registro entre 2018 y 2022 el mayor logro en más de dos décadas en la lucha contra la pobreza. Aumentaron los ingresos pero empeoró la calidad de servicios públicos básicos. Atajar la pobreza extrema, el mayor reto”.

 

La fuente de ese panorama fue el estudio Pobreza y desigualdad en México entre 1950 y 2024, de Miguel Székely, subsecretario de Prospectiva, Planeación y Evaluación de la Secretaría de Desarrollo Social, durante el gobierno de Vicente Fox, para quien, naturalmente, hay menciones especiales.

 

Así podemos ver que en 1950 México tenía una población de 27 millones 38,625 habitantes; 16.7& en pobreza alimentaria, 19.8 en pobreza de capacidades y 23.9% en pobres de patrimonio.

 

Sugerimos consultar el documento, el espacio digital no da para tanto; es natural que en ese periodo, de 54 años, las cifras siempre fueron al alza; la pobreza siempre rebasa al poder adquisitivo de la población; pero sería interesante observar cómo se empobreció México en dos episodios cruciales: Con “El error de diciembre de Salinas-Zedillo” de 1995 y la pandemia de 2019.

 

LA COSA ES QUE…

 

La inteligencia no está asociada a la riqueza, o al contrario: la ignorancia a la pobreza.

 

Siete u ocho de cada 10 mexicanos creemos en el México de hoy… ¿Usted prefiere a los méxicos del pasado?

 

Esto es la democracia

 

Qué tal.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *